Los antorchistas quintanarroenses participamos de manera responsable en el proceso electoral que culminó el pasado 6 de junio. Durante los aproximadamente 45 días que duró la campaña electoral, tomamos la decisión de suspender nuestras gestiones y movilizaciones para evitar cualquier crítica infundada, en la cual se nos acusara de perjudicar a tal o cual candidato. Tomamos la decisión con la misma responsabilidad y madurez con la que ejercimos nuestro derecho a elegir a quienes nos gobernarán en los 11 ayuntamientos del estado, así como a los cuatro diputados federales que nos representarán en la Congreso de la Unión, votando por los candidatos más afines a los intereses del pueblo humilde. El proceso electoral en su parte fundamental ha quedado atrás, y si bien es cierto al Instituto Nacional Electoral (INE), a los Institutos Electorales Estatales y a los Tribunales Electorales, les corresponde resolver irregularidades, controversias e impugnaciones, relacionadas con el proceso electoral 2020-2021; a los ciudadanos de a pie, a los obreros, campesinos, estudiantes, amas de casa, pequeños comerciantes, etc., no les queda otra opción que retomar la lucha de todos los días: la lucha contra la pobreza.
No debemos perder tiempo, debemos retomar la lucha por la solución de las demandas más urgentes, planteadas una y otra vez ante el gobierno del Estado, aunque dimos una pausa a nuestra exigencia de solución respetando el proceso electoral, no hemos olvidado ni por un solo día, cada una de las demandas de colonos y campesinos organizados en Antorcha, planteados reiteradamente al gobernador Carlos Joaquín González, quien aún tiene la oportunidad de demostrar que tiene la voluntad de cumplir sus compromisos, la oportunidad de demostrar a los miles de antorchistas que su palabra vale.
Ante una comisión representativa del Comité Estatal de Antorcha, desde mediados del año 2019, el mandatario estatal, asumió el compromiso de dar respuesta favorable a problemas añejos y urgentes, de los cuales es conveniente hacer un recuento para evitar que quede en el olvido por parte de los funcionarios encargados de ejecutar las soluciones:
Los campesinos antorchistas de las comunidades de los municipios de Othón P. Blanco, Felipe Carrillo Puerto, Bacalar, Lázaro Cárdenas, Tulum, etc., tienen muy presente en su memoria, la palabra del gobernador de entregar dotaciones de maíz para consumo, fertilizante y semilla. Este sería el tercer año en que los campesinos insisten en estas peticiones, y no pueden dejar de insistir porque se trata de necesidades vitales, de las cuales depende la alimentación de miles de familias, que tiene como único sustento la producción de maíz para consumo. Estamos en plena temporada de lluvias, y si el tiempo es bueno para sembrar, es cuando los productores más requieren el respaldo de las autoridades estatales para contar con los insumos y garantizar una buena cosecha. Del gobernador depende cumplir este compromiso.
En la colonia Fraternidad Antorchista de Chetumal, sus habitantes no olvidan lo dicho por funcionarios del gobierno del estado, quienes afirmaron que los recursos estaban solicitados para la obra de la pavimentación del acceso a sus viviendas y que en febrero de 2020 ya estaría iniciando dicha obra. Este compromiso es particularmente urgente, porque en cada temporada de lluvias se vuelve un calvario para los colonos transitar por un camino fangoso y lleno de hoyos, por eso no pueden dejar al olvido la pavimentación prometida por Carlos Joaquín González.
De igual manera 24 docentes de nivel kínder, primaria y secundaria, agremiados a Antorcha Magisterial están por cumplir tres años esperando cumplimiento del compromiso de contratarlos, de recibir un salario justo, no solo apoyo para pasaje; prestaciones como seguro médico, tan necesario en tiempos de pandemia, pago de aguinaldo y vacaciones. Si la Secretaría de Educación de Quintana Roo, acepta la indicación del gobierno federal, de regreso a clases presenciales es urgente que a los docentes se les otorguen las condiciones mínimas para llevar adelante su labor.
El compromiso de otorgar al albergue Estudiantil Felipe Carrillo Puerto, el comodato del edificio que ocupan desde hace varios años, tampoco ha quedado en el olvido para los moradores, ya que contar con dicho documento facilitaría la contratación de servicios de agua potable, tan elemental para acatar las medidas de higiene sanitaria recomendadas por la Secretaria de Salud para evitar contagios de covid-19, además sería un acicate moral para que el ayuntamiento de Othón P. Blanco, dejara de lanzar amenazas de desalojo contra los moradores del edificio de la seccional varonil.
Otro de los compromisos muy presente entre los colonos antorchistas es la dotación de terrenos para familias desalojadas del predio el Fortín, quienes desde hace más de tres años perdieron el único patrimonio con que contaban, el compromiso del gobierno del estado fue reubicarlos en otro predio, lo cual hasta la fecha sigue estando pendiente.
La lista de compromisos aún sigue, por la falta de espacio impide enlistarlos todos, no por eso son menos importantes; de cada compromiso depende el bienestar de muchas familias. El Movimiento Antorchista en los próximos días acudirá en comisiones cada vez más numerosas ante el gobierno del estado para insistir en el cumplimiento de los acuerdos tomados con el señor gobernador, de ser necesario, haremos uso de nuestro derecho constitucional de manifestación pública y pacífica.
Los antorchistas no nos engañamos, estamos claros de que así como debemos seguir nuestra lucha para que, quienes actualmente gobiernan, atiendan las necesidades del pueblo humilde, lo tendremos que hacer con quienes se alcen como ganadores en el proceso electoral 2021, porque el pueblo de México, y los quintanarroenses incluidos, no elegimos de manera democrática a los verdaderos representantes de la clase trabajadora, la inmensa mayoría de quienes ganaron algún cargo de representación local o federal, son los mismos económicamente poderosos, ahora con el disfraz de Morena y su aliados, que con todo descaro implementaron las mismas prácticas de comprar de votos, hacer turismo electoral, entre otras lindezas por el estilo; por lo tanto, una vez que tomen posesión de sus cargos su prioridad no será el combate a la pobreza, su prioridad será como siempre garantizar que las fortunas de los más ricos sigan creciendo aún a costa de la miseria del pueblo trabajador. La lucha del pueblo trabajador no se acaba, debe seguir con más fuerza y entusiasmo, más temprano que tarde, está condenada a la victoria.
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