Texcoco, Méx. Habitantes de Santa Catarina del Monte, Texcoco, pueblo ubicado en la zona montañosa de ese municipio, calificaron la pavimentación de la primera y segunda etapa del Circuito Kínder como la obra carretera de mayor impacto construida en esa región, tras la gestión llevada a cabo por el Movimiento Antorchista.
Con la intervención del ex diputado federal, Brasil Acosta, líder del Movimiento Antorchista en Texcoco, fueron pavimentados en dos etapas 900 de los mil 750 metros que comprende este camino y en breve dará inicio la tercera etapa.
Para garantizar la seguridad de los pobladores y por tratarse de un terreno montañoso fueron construidos muros de contención, guarniciones y banquetas, así como un drenaje pluvial que evitará la creación de encharcamientos e inundaciones.Cabe resaltar que como parte de los trabajos de la tercera etapa, serán removidos los postes de la línea telefónica y de la energía eléctrica que se encuentran emplazados a mitad del arroyo vehicular, con el objeto de evitar accidentes automovilísticos que pongan en riesgo la vida de la ciudadanía.
Fidel Torres Hernández nativo de Santa Catarina dijo que esta carretera "es la mejor construcción que se ha hecho aquí en el pueblo, principalmente porque los habitantes no pusimos ni un peso y porque además trae obras complementarias como los muros y el drenaje.Sin duda es una obra bien hecha".Agregó que los vecinos habían solicitado la pavimentación al municipio de Texcoco, pero no obtuvieron respuesta a sus peticiones.
El secretario del Comité Ciudadano de Control y Vigilancia (Cocicovi), Cristino Velázquez Clavijo, mencionó que el encarpetado de la primera y segunda etapa del Circuito Kínder es el fruto del trabajo en unidad de la comunidad apoyado por el Movimiento Antorchista, organización que calificó como comprometida en apoyar a la gente.
Dicen adiós a las inundaciones
Miguel ángel Espejel Velázquez beneficiario de la obra recordó que el Circuito Kínder era un terreno fangoso y una laguna que mantenía incomunicaba a la población "para cruzar la calle teníamos que colocar tabiques y caminar con los pies metidos en bolsas.Por muchos años vivimos así padeciendo lodazales.Con el pavimento y el drenaje pluvial ya se acabó ese problema".
Eleazar Espejel explicó que otro beneficio de la obra es la reducción de tiempo hasta tomar el transporte público "ya llegamos más rápido hasta la base de combis y con los zapatos limpios.También circulan más vehículos por esta zona, la gente camina tranquilamente por aquí.Ya no nos sentimos marginados ni incomunicados".
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