Alguna vez leí que el gobierno de López Obrador es el único que ha sabido cómo manejar el recurso público de los mexicanos, repartiéndolo de forma equitativa en sus programas de apoyo social, los cuales han dejado mucho de qué hablar y pensar, el gobierno actual ha creado entre sus beneficiados de dichos apoyos una especie de gratificación, pero casi al grado de tener que pensar que es por el mesías de Obrador que tienen ese apoyo. Los ejemplos más claros fueron los últimos comicios en donde la 4T ya venía haciendo campaña desde mucho antes que iniciaran las campañas electorales y el principal promotor fue el presidente de la nación, en primer lugar algo de señalar y aplaudir de AMLO y su gobierno es que han sabido manipular de una forma muy astuta a los pobres, si, a los que tanto rezo en su campaña política y los cuales siguen con la venda en sus ojos pensando que Andrés Manuel es el mesías de México.
Primeramente, los programas sociales en México han existido por lo menos desde hace 30 años, entonces no es algo nuevo que AMLO de dinero en programas de carácter asistencialistas, ya que los gobiernos panista y priistas lo venían haciendo desde antes, solo que el gran cambio con la “Cuarta Transformación” fue en penetrar en la mente de los mexicanos que el apoyo se lo deben a Morena y AMLO, haciéndolos olvidar que ese dinero es de los mexicanos y sus impuestos que pagan día con día, lo mismo pasa con las vacunas contra la covid-19. “Gracias a AMLO tenemos vacunas” son el tipo de cometarios que llegamos a escuchar, cuando la realidad es que en el contexto que nos encontramos, la vacunación contra este letal virus no se lo debemos a ningún gobierno, por obligación le compete al estado garantizar de este derecho que somos acreedores todos los mexicanos.
Los “servidores de la nación”, ellos que son trabajadores de Morena, aquellos que iban a ser primero vacunados contra la covid-19, antes que al personal médico y si esos mexicanos que trabajan para el presidente, son ellos los que se encargan de vacunar entre la gente el pensamiento de adoración para López Obrador, el propósito de estos trabajadores es tener contacto directo con los adultos mayores y todo aquel que tenga apoyo del gobierno, algo no muy distinto como las movilizadoras del PRI, que hacen el mismo trabajo solo que a estos los podemos ver con su chaleco color guinda en las calles y que su salario si es pagado del dinero de los mexicanos, lo mismo del PRI solo que más publico ahora con Morena.
Desde el mes de mayo jóvenes de todos los estados de la República han manifestado su descontento con el Gobierno actual, esto ante el pronunciado regreso a clases sin aún existir las garantías necesarias que aseguren seguridad para el regreso a las aulas. Una lucha contundente, constante y enérgica mostraron los estudiantes de la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (FNERRR) quienes han sido los únicos en no estar de acuerdo en regresar a las escuelas de esta forma y más aún sin existir un programa detallado de cómo se dará este regreso a las instituciones educativas, es entonces que de estos temas Andrés Manuel López Obrador, no habla y no escucha.
Los jóvenes que se manifiestan en la FNERRR son jóvenes que tienen el deseo de regresar a las aulas, pero asegurados sin que estén expuestos a ser contagiados contra covid-19 y, sobre todo, que desean aprender de una forma correcta, sin tener que estar perdiendo más conocimientos, la realidad es que México es gobernado por una persona que no tienen interés en el bienestar común, más que el del mismo y los de su color político, México ante esta atrocidad se encuentra en un serio problema y los jóvenes somos los que aún podemos hacer algo al respecto para poder salvar a nuestro país.
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