* La consigna del actual gobierno de primero los pobres, no se ha cumplido.
* El combate a la pobreza solo se puede hacer con más recursos que saldrán de una profunda reforma fiscal, que obligue a los más ricos a aportar más impuestos para el desarrollo social: Pedro Martínez Coronilla
Durango, Durango. – Seguirle el rastro a la medición de la pobreza en México, como el principal problema nacional, lo demuestra la publicación de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos 2022 que incluye un análisis comparativo de 2022 con datos de 2016, 2018 y 2020 lo cual es muy útil. Citando al investigador del Colegio de México Julio Boltvinik, así lo denunció Pedro Martínez Coronilla, líder estatal del Movimiento Antorchista en Durango, transmitido en un breve mensaje a través de sus redes sociales.
Informó “Los resultados de la publicación son una muestra de que la consigna del actual gobierno de primero los pobres, no se ha cumplido. Por ello, y dada la enorme desigualdad prevaleciente en el país, podemos afirmar que seguiremos encontrando alta pobreza de ingresos, aunque menor que en 2020, incluso sin considerar las otras dimensiones de la pobreza multidimensional. Por lo que la noción del estancamiento se mantiene”
El líder del antorchismo en Durango, citó además al profesor e investigador de la Universidad de Guadalajara, Máximo Jaramillo y la organización que fundó y dirige el Instituto de Estudios sobre Desigualdad, en el que cita los 7 puntos desglosados, donde puntualmente se informa el alcance en la entrega de los programas sociales a través de transferencias monetarias del gobierno morenista
Además, añadió que “Aunque los programas sociales son una herramienta para combatir la pobreza, lo cierto es que mientras los gobiernos no se decidan a una verdadera justicia social y en primer lugar que se deje de aplicar dichos apoyos de manera selectiva, para darles el carácter de programas universales para toda la población, que se respeten los derechos constitucionales a la salud, a la educación, al trabajo bien remunerado.”
“Con un aumento salarial suficiente, se recupera el poder adquisitivo, se mejora la calidad de vida de las familias trabajadoras y se fortalece el mercado interno. Pero también, para reducir la pobreza extrema se debe reducir la riqueza extrema, para financiar el combate a la pobreza solo se puede hacer con más recursos que saldrán de una profunda reforma fiscal, que obligue a los más ricos a aportar más impuestos para el desarrollo social.”, concluyó Pedro Martínez Coronilla.
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