“Nosotros propugnamos / La poesía del amanecer. / Este es nuestro mensaje, los / Resplandores de la poesía / Deben de llegar a todos por igual. / La poesía alcanza para todos”. Nicanor Parra, en “Manifiesto”
En sus conferencias culturales, Aquiles Córdova Morán, secretario general del Movimiento Antorchista Nacional, dice que “es tan importante que se declame. Pueblo que no declama es un pueblo que no conoce su poesía. Porque la poesía, por ser música, por tener melodía, ritmo y armonía, no solamente se debe leer, sino que se debe oír. ¡Declamadores vamos a declamar con toda el alma, a poner de relieve la música de la poesía para que la entienda el pueblo! Leyendo poesía y oyendo declamar a los grandes declamadores el pueblo mexicano, el pueblo pobre, puede llegar a romper la cárcel de su esclavitud actual”.
Por eso Antorcha promueve la declamación entre sus agremiados, amigos y simpatizantes. Han pasado por los concursos miles de antorchistas, niños y jóvenes, adultos mayores, campesinos y amas de casa que nos han deleitado con grandes interpretaciones.
El pasado 25 de febrero se llevó a cabo la I Jornada Nacional de Declamación. En las capitales de los estados se efectuaron concursos primero seccionales y luego estatales. Aquí en Puebla, en su capital, fue un concurso hermoso, de gran calidad de los declamadores y de las poesías de los autores más destacados de la humanidad. Por la gran cantidad de participantes se realizó en tres sedes. A mí me tocó en el famoso recinto de “El Alero”, donde pude apreciar hermosas declamaciones, donde los campesinos, los obreros, las amas de casa, los estudiantes y los activistas fueron todos excelentes.
Aunque no obtuve ningún lugar, pero fue una gran experiencia, el dar voz a los grandes poetas, mi participación fue con la poesía “El mal del siglo”, del gran poeta cubano Nicolás Guillen, que habla de la calumnia, del lodo que lanzan a la gente buena y luchadora como a nuestros dirigentes antorchistas y en general a nuestra organización y en particular a nuestro dirigente nacional, Aquiles Córdova Morán. Aprovecho para felicitarlo por su cumpleaños, deseándole larga vida y que goce de excelente salud, que aún tenemos mucho que aprender de él. Yo especialmente le dedico esta poesía.
Fragmento: “Señor, señor, ¿por qué odiaran los hombres al que lucha, al que sueña y al que canta?, ¡que puede un cisne dulce, guardar, sino ternuras en el alma! ¡Cuán doloroso es ver, que cada ensayo para volar, provoque una pedrada, un insulto mordaz, una calumnia! ¿Por qué será la humanidad tan mala, porque junto al camino de la gloria, siempre la envidia pálida acecha el paso del romero cándido y le lanza su flecha envenenada? ¡Cómo castiga el mundo al que nació con alas y sueña con la luz del infinito desde las lobregueces de la jaula!... estos hombres de ahora, solo piensan en el oro, que enfanga, todas las limpideces de la vida, todas las alburas de las almas”.
Sepan ustedes que el Maestro es muy querido y apreciado por los antorchistas, aparte también lo admiramos, que creo firmemente que ya es inmortal, que su vida no ha sido en vano, que con sus obras escritas y su obra de ser el constructor de una organización nacional, que pese a que el gobierno actual quería acabar y matar, esta organización sigue más viva que nunca y así pasen siglos, su obra será recordada.
Volviendo al tema que me ocupa acerca de la hermosísima I Jornada Nacional de Declamación quiero felicitar a todos los participantes. Dice un dicho que no solo de pan vive el hombre, y al hambriento no le basta el pan hay que llenar también su espíritu y su conciencia. Hagamos caso de nuestro dirigente y difundamos la poesía y la declamación.
Para cambiar el mundo se necesita cambiar la conciencia del hombre alimentarla con los más nobles ideales no es tarea fácil, pero en el Movimiento Antorchista Nacional ya se ha puesto manos a la obra, por lo que ya se le reconoce a nivel nacional su gran aportación, no solamente en el arte de declamar, también en canto, música, bailes folclóricos, danzas, pintura, oratoria, etcétera.
El promover la cultura es el pan de cada día de miles de antorchistas a lo largo y ancho de nuestro país. Gracias a la Comisión Cultural, que encabeza Juan Celis Aguirre. Pero aunque se hace mucho, aún es apenas un grano de arroz en el gran país que somos, hace falta que la declamación sea otra vez impulsada y desarrollada desde las escuelas, pero ahora la educación está en manos de la Cuarta Transformación que hasta ahora solo ha servido de trampolín a Delfina Gómez, que lo único que hizo al frente de la SEP fue su cochinito para tener recursos para su campaña.
Además de quitar las escuelas de tiempo completo, Gómez estuvo en la SEP y la dejó peor. Pero para este mal, Antorcha promueve la creación de un partido político nuevo que impulse más educación, cultura y más deporte en nuestro país. Todos manos a la obra.
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