· Urgen políticas públicas del actual Gobierno federal para atender la inseguridad alimentaria en comunidades rurales de Jalisco y del país, dice Serafín García.
De preocupante calificó el líder del Movimiento Antorchista en la Costa Norte de Jalisco, Serafín García Hernández, el que los productores de alimentos de localidades rurales en México, como Tomatlán, no tengan garantizado su abasto de alimentos pese a que ellos son los que los producen.
Increíble, pero es una realidad; y lo afirmó basado en las estadísticas del Instituto de Información, Estadística y Geográfica del Estado de Jalisco (IIEG), que antes de ser hackeado, evidenció que el 47.2 por ciento de las localidades rurales, que no son cabecera municipal, no tienen abasto de alimentos.
El abasto de alimentos se refiere a que las personas de la localidad puedan comprar, diariamente, por lo menos uno de los siguientes alimentos: frijol, maíz, harina o tortillas de maíz, harina o pan de trigo, arroz, leche, huevo, carne de res o de puerco, pollo, pescado fresco, o frutas y verduras.
“Lo preocupante es que sean los productores de estos alimentos los que no tienen acceso a ellos, como el caso de las familias de las comunidades de Tomatlán, que incluso exportan productos agropecuarios”, expuso García Hernández.
Frente a este panorama, subrayó que es urgente que el Gobierno federal implemente políticas públicas para atender la inseguridad alimentaria en comunidades rurales de Jalisco y del resto del país.
Se define como inseguridad alimentaria cuando las personas no tienen acceso regular y permanente a alimentos en cantidad y calidad suficientes para sobrevivir y a la falta de acceso constante de alimentos inocuos y nutritivos. Las personas o familias que viven con inseguridad alimentaria, como consecuencia de ello, tienen una dieta de baja calidad y mala nutrición, expuestos a problemas de salud por su mala alimentación.
García Hernández aseveró que se debe tener en cuenta que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que un objetivo prioritario de las políticas, acciones y programas impulsados por el Estado, a través del gobierno federal, es “contribuir a la soberanía y seguridad alimentaria de la nación, mediante el impulso de la producción agropecuaria del país”.
Señaló lo anterior, tras entregar apoyos alimentarios a un considerable número de familias de diversas comunidades del municipio de Tomatlán, donde destacó que en Jalisco hay 10 mil 56 localidades rurales que no son cabecera municipal, y mientras más pequeña la localidad, menos posibilidad de abastos de alimentos.
“De acuerdo con algunas fuentes, son más de un millón de jaliscienses que padecen inseguridad alimentaria”, puntualizó.
Remarcó que, de acuerdo con las mismas estadísticas del IIEG, el 35.4 por ciento cuenta con abasto de alimentos, pero en el 17.4 por ciento no hay información.
Esta situación, dijo, hace más propensas a la inseguridad alimentaria a las comunidades rurales que representan el 11.8 por ciento de la población del estado, según el Censo de Población y Vivienda de 2020 del Inegi.
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