(Primera de dos partes)
No cabe duda que el modelo neoliberal que ha dominado al mundo durante los últimos 40 años está sufriendo la peor crisis en su historia; y, tal vez, represente esta crisis la fase terminal de este modelo capitalista.En los últimos meses desde principios de este año 2020, han ocurrido fenómenos económicos y sociales que, dada su magnitud y su poder de afectación a la sociedad, están mostrando que el modelo económico que se basa en la maximización de ganancias que no es otra cosa que la maximización de la extracción de plusvalía a los trabajadores, la cual ha permitido la descomunal concentración de la riqueza en unas cuantas manos- esté convulsionándose por todas partes.Según la organización OXFAM, el actual modelo económico ha llegado al grado de que apenas el 1 por ciento de la población los mega millonarios- concentren el doble de la riqueza equiparable a lo que tienen 6,900 millones de seres humanos, es decir más del 90 por ciento de la humanidad.Este modelo mantiene a más de la mitad de la humanidad sobreviviendo con apenas 5.5 dólares promedio al día; modelo que permite en el mundo que tan sólo 4 centavos de dólar de lo que se recauda por impuestos sean obtenidos de la riqueza, mientras 96 centavos de dólar salen de los bolsillos de las clases trabajadoras.Este modelo ha permitido que los súper ricos del mundo eludan hasta el 30 por ciento de sus obligaciones fiscales.El modelo neoliberal se instauró a la caída del socialismo soviético, el cual, con el pretexto de que la "globalización" de la economía mundial, la riqueza aumentaría enormemente y se distribuiría mediante "la teoría del goteo", a tres décadas de esta "globalización", los "ríos de riqueza" nunca fluyeron hacia las capas pobres de la población; más bien siguieron llenándose los océanos de riqueza de los súper ricos.La "globalización" nunca ha permitido que los niveles de vida de los pobres hayan subido ni siquiera milimétricamente (los salarios en Estados Unidos y la mayor parte del Globo Terráqueo no han aumentado desde hace casi 40 años, y la pérdida del poder adquisitivo de la clase trabajadora, coloca a esta clase en niveles de pobreza y marginación mayores que antes de que se instaurara el "capitalismo salvaje").
Y ahora, que se presenta la pandemia del coronavirus (Covid 19) ésta hace estragos en países considerados de "primer mundo"; se presenta en países que por su supuesto alto desarrollo económico y cultural debiese haber sido, sino evitada, por lo menos controlada con mayor rapidez y eficacia.Pero ahí, en esos países, es en donde con una velocidad de propagación y de afectación ha logrado poner en jaque los sistemas de salud de las potencias europeas.No me detendré a explicar el fenómeno de la enfermedad llamada Covid 19, pues los medios de comunicación han sido muy prolijos en eso.Pero lo que si me interesa es aportar algunos elementos que nos permitan analizar el por qué a nivel de hipótesis- "surgió" sin estar comprobado- en China y porqué ahí pudo ser controlada con mucha eficacia la pandemia, mientras en otras naciones "adelantadas" no ha ocurrido así.
El milagro chino y el rencor de los imperialistas
China se ha convertido en pocas décadas en la segunda potencia económica mundial, en el principal exportador de maquinaria pesada y de televisores y muchos productos de alta tecnología del mundo.Su poderío económico ha permitido que teniendo sólo el 7 por ciento del territorio del Globo, pueda alimentar a la quinta parte de la humanidad (China tiene una población de 1,400 millones de seres humanos).China está teniendo un desarrollo tan grande en lo económico y social, que en los últimos 5 años ha logrado sacar de la pobreza a cerca de 70 millones de personas (China es el mayor productor agrícola del mundo y tiene sólo un 15 por ciento de su territorio como apto para la agricultura; es también el mayor productor de pollos, huevos y cerdos del planeta, datos que pos si mismos nos dan una idea de los logros de las actividades primarias, las cuales son fundamentales para tener un desarrollo industrial verdadero.La agricultura china está mecanizada en más de un 60 por ciento y el gobierno chino ha establecido como meta para el año 2035 que las diferencias de nivel socioeconómico y cultural entre las ciudades y las zonas agrícolas se acaben).Por otra parte, ante la necesidad de proveer alimento a la quinta parte de la humanidad, el gobierno chino ha comprado millones de hectáreas en áfrica y recientemente compró dos millones de hectáreas a Ucrania, las cuales son de las más productivas del mundo.China se ha convertido en el principal competidor de la súper potencia capitalista, Estados Unidos, también en la producción industrial casi el 50 por ciento de su actividad económica es en la industria y en la construcción entre 2011 y 2013 China utilizó más cemento que Estados Unidos durante todo el siglo XX- y, actualmente, en la industria produce el 10 por ciento de toda la producción industrial del Globo, siendo el mayor exportador del mismo sector económico.Y para que no quepa duda de los alcances de la industria china, actualmente produce casi el 30 por ciento de la fabricación de maquinaria pesada y de la construcción en todo el mundo.Y algo en lo que nadie puede superar al "Gran Dragón" es que el 46 por ciento de su producción nacional anual, se dedicó a la inversión (qué lejos están los capitalistas bananeros de México y otros países del mundo qué, lejos de reinvertir sus ganancias y así ayudar a superar el desempleo y la pobreza,prefieren gastarlas en lujos o simplemente la depositan en bancos extranjeros).China es la potencia que en unos cuantos años desplazará a Estados Unidos como la principal potencia económica del Globo; pero el crecimiento anual de su economía que ha sido durante décadas alrededor del 10 por ciento anual,quiere ser frenado por Estados Unidos.De ahí la "guerra comercial", de ahí los ataques de la súper potencia imperialista que ve cómo sus años dorados de dominio se le están acabando.
El caso Huawei
Esa "guerra comercial" se ha intensificado con la llegada al poder en Estados Unidos de la clase capitalista "ultra nacionalista" (encabezada por Donald Trump), la cual quiere volver a dominar al Globo por la "vía económica" sin descartar, por supuesto, ni la vía militar, ni la vía tecnológica-.Por esta razón en el año 2019 Donald Trump promovió el ataque a una de las empresas más importantes del Globo en el terreno de la producción de telefonía celular: Huawei. La empresa china en los últimos años ha venido desplazando a otras empresas, tanto norteamericanas, como europeas y de otras partes del planeta en la venta de dispositivos de telecomunicaciones.A mediados del 2019, el Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó de "fraude bancario electrónico y de relaciones con Irán" al gigante de las telecomunicaciones chino.Esta acusación derivó en una "orden judicial ejecutiva" que prohibió a toda empresa norteamericana proveedora de equipos, de tecnología, de soluciones y servicios tecnológicos venderle a Huawei.Lo que ocasionó que la empresa china de un momento a otro ya no pudiera instalar en sus teléfonos fabricados por la misma los dispositivos de Google y otras empresas gringas.Estas empresas suspendieron la transferencia de software, hardware y servicios a Huawei.Lo que significó que los dispositivos futuros del fabricante asiático carecieran del sistema operativo Android y otras aplicaciones de Google (algo así como si repentinamente una marca de automóviles que utiliza refacciones hechas en otro país, se quedara sin esas refacciones por la negativa de quien las fabrica a vendérselas).El objetivo del gobierno gringo, sin duda, es destruir a los competidores chinos de las telecomunicaciones.El gobierno de Trump también acusó a Huawei de estar utilizando los dispositivos que les venden los norteamericanos como "arma de espionaje".Pero, ¡Ojo! Ni Francia, ni Alemania secundaron las acusaciones de Trump.En realidad, desde hace tiempo que las potencias europeas ya no ven ningún beneficio el estar secundando las agresivas políticas económicas de Estados Unidos: por el contrario, las conciben como perjudiciales a sus respectivas economías.Sin embargo, la guerra comercial ha seguido su curso, Trump ha elevado los aranceles a cientos de productos que importan los gringos de China.El gobierno chino ha respondido con la elevación de cuotas arancelarias a cientos de productos norteamericanos. Y en la carrera por ganar el mercado mundial de las telecomunicaciones, Huawei no sólo no fue aniquilada por las medidas tomadas por Trump, sino que esta empresa siguió su carrera tecnológica desarrollando la tecnología 5G, la más avanzada que logra que la telefonía, internet y otros dispositivos de telecomunicación tengan mucha más velocidad que la tecnología 4G; la 5G, tiene ya utilización en otros campos de la tecnología y del desarrollo industrial, como la industria automotriz, la industria de aparatos electrónicos, la medicina, la farmacéutica y lo más peligroso para los intereses imperiales- en la industria militar. Huawei ya controla un tercio de la telefonía celular de Europa y ha logrado ir conquistando los mercados asiáticos y latinoamericanos.La guerra comercial la está perdiendo Estados Unidos.
¿Cómo seguir la guerra comercial contra China?
En mi modesto punto de vista, no podemos descartar la hipótesis de que las élites que gobiernan Estados Unidos (incluidos los mismos "halcones guerreristas" que anidan, tanto en el Partido Republicano, como el Partido Demócrata) decidieron continuar la guerra contra China, pero utilizando métodos más sucios y genocidas como la "guerra bacteriológica".Son muchas las voces que en el mundo entero sostienen que el coronavirus, Covid 19, es una creación de los científicos bacteriológicos al servicio del gobierno yanqui.No olvidar nunca que el gobierno más feroz en cuanto a medidas genocidas de gran escala, ha sido el de Estados Unidos; no olvidar que a finales de la Segunda Guerra Mundial fue este gobierno el que decidió exterminar a cientos de miles de habitantes civiles de Japón cuando decidió lanzar dos bombas atómicas en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki; no olvidar que en la Guerra de Corea, utilizó la guerra bacteriológica contra los norcoreanos a principios de la década de los 50 del siglo pasado; no olvidar que en Vietnam agredió al pueblo vietnamita no sólo con miles de toneladas de bombas convencionales, sino también con millones de litros de agentes químicos (Napalm y fósforo blanco) que aniquilaron las selvas y exterminaron a decenas de miles de soldados y ciudadanos civiles como si fueran cucarachas rociadas con líquidos que al simple roce del suelo estallan en infernales llamas-.No olvidar que la Cuba revolucionaria en sus primeros años fue agredida con una guerra bacteriológica que mató a decenas de miles de seres humanos y destruyó miles de hectáreas de plantíos de la agricultura de la isla y también mató a decenas de miles de cabezas de ganado (sobre todo porcino), todo esto para aniquilar la economía cubana.¿Acaso la humanidad puede ignorar que a todo país que no se ha negado a someterse a los dictados imperiales de Estados unidos lo ha agredido con invasiones directas (México, Panamá, Nicaragua, Granada, Irak y Afganistán), con "primaveras árabes" (Libia, Túnez, Egipto, Siria, etc.), o con "revoluciones de colores" (Ucrania)? Sin exagerar con muchos ejemplos se puede ilustrar el papel genocida y fascista del país que se ha ostentado durante siglos como el paradigma de la "democracia", la "libertad" y la "justicia".Estados Unidos, sin embargo, ha entrado en la fase del declive como la potencia que domina al planeta.En ese declive económico, político y hasta militar están jugando un papel muy importante naciones como Rusia y China.
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