MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Corrupción y negligencia detrás de la crisis de agua en México

image

La sequía afecta a una buena parte del país; un 77.68 por ciento del territorio, según el Monitor de Sequía del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Si bien los medios de comunicación nacionales han resaltado, recientemente, casos como el de los municipios del estado de Nuevo León, donde habitantes de colonias humildes hacen largas filas para obtener el líquido vital, e incluso se les ve bañándose en plena vía pública cerca de las tomas donde encuentran agua; la realidad es que la falta de agua para el consumo, actividades humanas y para la actividad agropecuaria, es un problema que afecta a muchos estados, entre ellos, San Luis Potosí. 

La falta de agua en las ciudades y el campo se le suele atribuir más a la falta de lluvias que impide que se llenen las presas; y, la verdad, no es así del todo, ya que también intervienen, de manera importante, las políticas que siguen los gobiernos estatales y el federal, en la captación y distribución de agua, en los recursos que se destinan a obras como nuevas presas, en las concesiones a empresas para la extracción del líquido.

Veremos que, en México, el Gobierno federal y el estatal de San Luis Potosí no se preocupan realmente por aminorar el impacto de la época de sequía en la población, particularmente la de escasos recursos económicos, se cae en la negligencia, en la corrupción y en la insensibilidad. 

Primero echemos un vistazo a lo que nos dice el periódico El Universal de San Luis Potosí en su edición del 24 de junio del 2022 con relación a la situación crítica de la sequía en el estado: “Pese a lluvias, presas de SLP se mantienen en niveles críticos”. “Conagua en San Luis potosí alerta que la sequía azota principalmente a las presas de la zona metropolitana de la capital potosina”. Y sí, se nos dice que la Presa San José se encuentra aun 16.5 por ciento de su capacidad, la de Presa del Peaje a un 11.4 por ciento, la Presa El Potosino a un 26.8 por ciento y la Presa Cañada del Lobo a un 37.7 por ciento. 

La Presa El Realito (que se encuentra en el estado de Guanajuato pero que abastece a muchas colonias de la zona conurbada de San Luis Potosí), está a un 58.1 por ciento de su capacidad. Me detendré en esta última presa, ya que ha sido muy polémica en esta época de sequía. Se han dado innumerables averías en los ductos que llevan el agua de la Presa a la ciudad. La explicación que dan las autoridades es que son fallas estructurales y estas fallas han provocado que alrededor de 30 colonias de San Luis Potosí capital y de Soledad de Graciano Sánchez se queden continuamente sin agua en los últimos meses, entre ellas Jardines del Sur, Progreso, Nueva progreso, Himno Nacional y San Leonel.

Pues bien, estas averías en los ductos por fallas estructurales no son otra cosa que malos trabajos por parte de la empresa que se encargó de la obra y de la falta de supervisión (léase: corrupción) de las dependencias encargadas, y que ha llevado al titular de la Comisión Estatal del Agua (CEA), Benjamín Pérez Álvarez, a decir: “…quien se encuentra obligada financiera y contractualmente obligada es la empresa” (El Sol de San Luis, 26 de abril)

Por otra parte, en un estudio de Laboratorios de Estudios sobre Empresas Trasnacionales (LET) de la UNAM, titulado en México no falta agua, sobra chatarra, señala que en México empresas como Coca- cola, Pepsi, Nestle, Bimbo, entre otras, consumen 133 mil millones de litros en sus procesos de producción de alimentos y bebidas, y “los resultados de dichos procesos productivos no solo son problemas a la salud que estos productos causan a las personas, sino también, los graves daños al ambiente en México”. 

Pero hay más:  el estudio señala: “la cifra de consumo de agua podría ser mayor, ya que la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) no supervisa rigurosamente la extracción del líquido de las concesiones del agua. Además, a esta cifra se le agrega la cantidad de agua desechada: 119 mil millones de litros de agua sucia que después de los procesos industriales regresa a cuencas y acuíferos”. Y para no parar de asombro, amigo lector, este estudio dice que la empresa Coca-Cola necesita ¡34 litros de agua para producir tan sólo un litro de este refresco! Pero no sólo eso lo deja a uno pasmado pues Coca-Cola FEMSA pagó, en 2018, esto es para ripley ¡2 mil 600 pesos por cada una de sus concesiones!

Estos son solo dos botones (permitir que empresas realicen obras con fallas y vicios ocultos como el caso de la Presa El Realito, y que las grandes trasnacionales se roben el agua y paguen una bicoca por las concesiones) que muestran que los gobiernos no están preocupados por atender el problema del agua que padece la población. 

Sólo un gobierno sensible aplicará todos los recursos públicos necesarios para crear una infraestructura importante para el almacenaje, distribución y conservación del agua a fin de que la población no sufra de la carencia de este vital líquido. Y no sólo eso: hará que las empresas transnacionales no abusen en sus procesos de producción mal utilizando el agua y paguen un impuesto que corresponda a sus grandes ganancias, el cual debería ser usado para la conservación de ríos y mantos acuíferos, y para crear esa infraestructura hidráulica. Así las cosas.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más