Coquimatlán, Colima. La Casa de Estudiantes de Coquimatlán requiere apoyo para que comience a funcionar.Se trata de una Casa construida gracias a la gestión de los diputados antorchistas ante el Congreso de la Unión.Los recursos fueron etiquetados exitosamente y se transfirieron de las arcas federales a las del Gobierno del estado, que ejecutó la obra a través de SEIDUR.
La obra se terminó de construir desde hace meses, sin embargo, la falta de equipamiento como camas, sillas, mesas, entre otros muebles necesarios, ha impedido que el edificio funcione adecuadamente.A pesar de que se encuentra frente al campus de la Universidad de Colima, ubicación privilegiada para los estudiantes que asisten a esa institución, en la Casa todavía no hay ningún morador, por lo que el edificio se encuentra virtualmente abandonado.
Esta situación ha permitido que las instalaciones de la casa sean vandalizadas en repetidas ocasiones.Ante los hechos, Rosario Galeana, dirigente de los antorchistas de Coquimatlán, invitó a sus compañeros a realizar una faena en el citado inmueble, con la finalidad de restaurar los muros, retirar la maleza y salvaguardar la integridad de la Casa.Como parte de esta actividad, los antorchistas pintaron las paredes para borrar los grafitis del lugar
Luis Enrique López Carreón, dirigente estatal del Movimiento Antorchista, ha cuestionado en repetidas ocasiones el compromiso que tiene el Gobierno del Estado con la educación, pues a pesar de que Antorcha construyó una Casa de Estudiantes para brindar oportunidades a jóvenes de escasos recursos económicos, hasta la fecha el Gobierno se ha negado a facilitar el equipamiento necesario para la Casa.
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