Desde hace dos años insistimos al Gobierno municipal de Hermosillo, Sonora, que se construya un puente peatonal nuevo en la colonia La Antorcha, ya que el que está actualmente, representa un peligro para niños, jóvenes, amas de casa y trabajadores que circulan por esa vía de comunicación. Todo ha sido en vano.
Dicho puente fue construido entre 2006 y 2007 por los mismos vecinos de la colonia La Antorcha, organizados en el Movimiento Antorchista, y fue el señor Mario Núñez Gastélum, que en paz descanse, propietario de un taller de herrería, quien construyó dicho puente, sirviéndole a mucha gente para poder cruzar el arroyo, que año con año, en temporadas de lluvia, prácticamente se llena hasta el tope.
Con la fuerza del agua que lleva el arroyo Lázaro Cárdenas, el puente se fue debilitando y deteriorando, al grado de que, en esta temporada de lluvias, hay grave riesgo de que se lleve toda la estructura. En estos momentos, bajo esas condiciones, que son peligrosas, los vecinos lo siguen usando.
El año pasado, personal del Ayuntamiento fue a colocar una débil cinta de precaución para que no se utilizara, misma que el viento se llevó; y se comprometió a iniciar la construcción de un puente nuevo de manera inmediata, pero hasta ahorita no hay señal de que querer iniciar la obra.
El pasado 7 de marzo del presente año, sostuvimos la última reunión con el secretario del Ayuntamiento, Florencio Díaz Armenta, acompañado de la directora de la Coordinación de Infraestructura, Desarrollo Urbano y Ecología (CIDUE), Astarté Corro Ruiz y su personal; en dicha reunión se revisó el acuerdo previo de que ellos debían llevar una calendarización de inicio de construcción de obras de agua potable, pavimentación y, entre otras, la construcción del puente peatonal, que desde el año pasado debían iniciarse, pero para no hacérsela tan larga, salieron con el argumento de que sólo habían sacado “número paramétricos” y que el sistema del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) “aún no se había abierto” y, por lo tanto, no podían ingresar obras al sistema, cosa que les impedía dar una fecha de inicio de las obras.
¡Fíjese usted nomás!, el secretario del Ayuntamiento y la directora de CIDUE dando esos argumentos tan falsos y rebuscados, ya hasta se parecen a los funcionarios de Morena.
Esta actitud de los funcionarios solo nos demuestra incapacidad para dirigir un municipio y poca seriedad en los compromisos. No quiero pensar que el alcalde Antonio Astiazarán muestre doble cara a la ciudadanía, o por lo menos no a los antorchistas hermosillenses, ya que, en diciembre de 2022, en una reunión que sostuvo con el Comité Seccional de Antorcha y parte de su personal, entre ellos el secretario, el edil expresó su voluntad de comenzar las obras que nosotros mismos le planteamos desde octubre de 2021. Aquí solo hay una de dos sopas: o las patas y las manos no le hacen caso a la cabeza o la cabeza da línea para que los acuerdos en campo no se cumplan. De todos modos, manifiesto mi duda respecto al actuar del “Toño”, y esperamos que sus actos sean congruentes.
Por nuestra parte, compañero antorchista, ya sabemos cuál es el camino a seguir cuando una autoridad se niega en los hechos a cumplir los acuerdos pactados con el pueblo organizado, y en este caso, en concreto la construcción del puente peatonal. Tenemos que ponernos a luchar, y este próximo miércoles 22 de marzo, a las 10 am, nos vemos en catedral para exigirle a la autoridad municipal que cumpla con los acuerdos, y solicitar la intervención del señor presidente municipal. Lo que hemos logrado en nuestra colonia, el agua potable, drenaje, electrificación, las escuelas y otros servicios más, ha sido por todas las marchas, los plantones y mítines que hemos tenido que hacer, nadie nos ha regalado nada, los servicios que tenemos, son gracias a la lucha organizada de nuestro Movimiento Antorchista. Sigamos construyendo una mejor colonia, para que todos tengamos una mejor calidad de vida.
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