López Obrador y su partido en el gobierno nuevamente han fracasado, esta vez porque el discurso presidencial y las medidas tomadas no han podido detener la elevación de los precios del gas.
Muchos dirán que no es fracaso suyo puesto que no depende de él ni de su gobierno, ya que la tendencia al alza se debe a situaciones fuera de nuestro país.
Pero López, aparte de que lo prometió en campaña, se atribuyó en el 2020 la baja en los precios de este combustible. Ahora, sus oponentes lo acusan porque no ha podido frenar la elevación de los costos, aunque ha inventado todo un conjunto de maniobras que han resultado irrisorias.
Pero nosotros no somos de esos que solamente acusan al gobierno sin bases objetivas. Es un fracaso de la 4T, de López y de sus funcionarios porque han sido incapaces de detectar el origen real de la elevación de los precios, y ahora sus medidas solamente han demostrado el bajo conocimiento del mercado mundial y de las leyes más básicas de la economía política.
El problema es que ni López ni sus seguidores y funcionarios pudieron detectar el aumento inevitable de la demanda de gas en el mundo. Nadie consideró, o simplemente ignoran una de las leyes más conocidas de la economía (la ley de la oferta y la demanda), que expresa que cuando la demanda aumenta y la oferta es baja los precios de las mercancías se elevan. Y viceversa, si la demanda baja y la oferta se eleva, los precios bajan.
De esta manera, la recuperación económica mundial ha traído como consecuencia el aumento de la demanda de gas, pero que al haber cerrado varias empresas y al haber frenado la producción durante la pandemia, la oferta es baja, lo cual provoca que el precio de esta mercancía gas LP se eleve en todo el mundo.
Y no solo eso, sino que también se prevé que los precios sigan aumentando debido a que se aproxima el invierno y que la demanda doméstica aumentará.
Así, López Obrador y sus funcionarios que solamente sirven para obedecer y adular al presidente, aunque quisieron revertir esta situación creando mecanismos artificiales, debido a que creen que en verdad los precios suben por “corrupción” o por las empresas abusivas de gas, la realidad aplasta sus medidas subjetivas.
Fallan en la solución porque fallan en el diagnóstico.
Como las empresas son corruptas y abusivas, piensa el presidente, ya que venden más caro el gas para afectarlo a él, a su gobierno y su partido, entonces hay que crear otra empresa que venda más barato el hidrocarburo, y también hay que darle toda la publicidad y hasta hay que llamarle Gas Bienestar, de esta manera, según él, la competencia haría que las empresas cobren lo justo.
Pero el Gas Bienestar no solamente ya fracasó por su nulo dinamismo, sino que sus precios superan a otras empresas distribuidoras. Además de que está a punto de superar el precio límite fijado por la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
Ese precio límite es otra de las medidas tomadas por el gobierno, la cual ha fracasado también, ya que se ha convertido en una camiseta que no puede contener la corpulencia que está creciendo en su interior. Lo único que ha provocado es que las ganancias de las empresas distribuidoras disminuyan, lo cual no han estado dispuestos a aceptar, por lo que ha habido paros y protestas de éstas.
El gobierno de Morena ha fracasado en la contención de la violencia en México, en la atención de enfermos por Covid-19, en la elevación de los precios de la canasta básica, y todas estas fallas se deben a un factor común: la nula capacidad para interpretar la realidad y, por lo tanto, transformarla creando mecanismos que verdaderamente funcionen.
Esto lo único que nos vuelve a demostrar es que Morena en el poder no conseguirá transformar para bien la situación en que vivimos millones de mexicanos. Sus acciones no pueden cambiar la realidad porque sus ideas están equivocadas, su forma de interpretar el funcionamiento social está mal. Y es que para cambiar este país no bastan las buenas intenciones y los discursos. Se necesita un gran conjunto de ciudadanos organizados y capaces de discernir entre lo que es real y las mentiras que dice el Gobierno de Morena.
Para cambiar al país se necesitan verdaderas medidas que sanen las graves heridas que tiene nuestro México, y eso, como ya lo vimos, no lo podrá hacer Morena ni López Obrador. De eso debemos habernos ya dado cuenta.
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