Torreón, Coahuila.- Integrantes del Movimiento Antorchista de Coahuila realizaron dos cadenas humanas en el municipio de Torreón y Saltillo, para exigir justicia por el asesinato de los líderes antochistas en Chilpancingo, Guerrero, Conrado N., y Mercedes N., así como de su menor hijo de seis años de edad.
Ignacio Cruz Tobón, integrante del Comité Estatal del Movimiento Antorchista explicó que cientos coahuilenses, adheridos a la citada organización social, se suman a las acciones de protesta que se realizarán este jueves de manera simultánea, para exigir al Gobierno del estado de Guerrero, y al Gobierno federal, castigo para los asesinos que le arrebataron la vida a dos luchadores sociales, el pasado 12 de abril, en las cercanías de Chilpancingo.
“Desde entonces, pedimos a las instancias de justicia de Guerrero la investigación urgente, como lo merece cada mexicano, sobre este terrible crimen y, desde luego, encontrar a los asesinos para castigarlos conforme a la ley. Sin embargo, no se ha detenido a nadie. Y, a pesar de pedirla de manera respetuosa, tampoco la gobernadora Evelin Salgado Pineda le ha agendado una reunión al Comité Ejecutivo Nacional de Antorcha para solicitarle su intervención y se haga justicia por estos crímenes”, expuso.
Refirió que investigaciones sobre estos asesinatos arrojan que las víctimas fueron golpeadas y torturadas, por lo que los antorchistas están indignados porque esto no puede pasar en el país.
Cruz Tobón anunció que el próximo 6 de junio asistirán más de seis mil antorchistas en comisión para conmemorar el día de los mártires antorchistas y exigir a la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda que intervenga para que se encarcelen a los responsables de esos asesinatos y además exigir que cese la ola de violencia en México.
Aseveró que nadie puede negar que las muertes por violencia, en todos sus matices, han incrementado notablemente desde que Morena llegó al poder, actualmente cuenta con la mayoría en la Cámara de Diputados, y también de los gobernadores. Morena, que, prometió acabar con la inseguridad, no solo no ha cumplido su promesa, cada vez está más lejos de cumplirla, y, lo más grave es que, el presidente Andrés Manuel López Obrador sigue casado con la política equivocada de “abrazos, no balazos”. Faltando a toda lógica, los cuatro años y medio de su gobierno no le han servido, para aprender que esa no es la vía para que México recupere la paz y la tranquilidad.
El presidente, acentuó, no quiere reconocer que la violencia creciente en nuestro país es hija natural y consecuencia de su política errada.
Por último, el líder social invitó a los coahuilenses para que este próximo 4 de junio no voten por Morena en las elecciones para elegir al nuevo gobernador, ya que sería un gran peligro para el estado.
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