Tecomatlán, Puebla.- En medio de una mala organización por parte del personal de Bienestar, dio inicio la jornada de vacunación contra el coronavirus en las instalaciones del Hospital Integral de Tecomatlán.
Los primeros en recibir la vacuna fueron los adultos mayores de 60 años, quienes en el primer día de vacunación se dieron cita en las inmediaciones del nosocomio a partir de las 04:00 horas de la madrugada, aunque el registro realmente comenzó a realizarse a partir de las 08:00 horas, para vacunar a los primeros a las 09:00 horas.
Durante el primer día de vacunación se presentaron en el lugar cuatro elementos del Ejército Mexicano quienes se encargaron de resguardar las vacunas junto con los "servidores de la nación” quienes, sin una buena organización, ni vestigios de una logística previamente elaborada comenzaron a registrar a las personas que llegaban al lugar sin considerar a quienes ya se encontraban ahí desde horas antes.
Después de la aplicación de la inyección hubo un tiempo de espera de 30 minutos, momento en el que el personal médico encabezado por el director del Hospital Dr. Neylin Véliz Pradel aprovechó para informar a los pacientes las medidas y cuidados que deberían tener después de haber sido vacunados, además de exhortarlos a que continúen llevando a la práctica todas las medidas sanitarias correspondientes puesto que solo acaban de adquirir la primera dosis y aun con la segunda, el medicamento solo garantiza un 62% de su efectividad.
La aplicación de la vacuna se llevó a cabo durante tres días, con un horario de 8:00 am a 5 pm, aplicando 200 dosis diarias.
Durante estos tres días los elementos de Seguridad Pública Municipal hicieron presencia en el lugar con el fin de guardar el orden y la paz social, de igual manera, se encargaron de proporcionar a las personas gel antibactibacterial y cubrebocas, así como estar desinfectando de manera constante el espacio y los inmuebles.
Aún quedan personas por vacunarse, quienes el último día por falta del insumo ya no pudieron hacerlo y que tuvieron que retirarse con la única esperanza de poder ser vacunados en otro lugar, algunos de ellos acudieron a la junta auxiliar de Olomatlán o al municipio de Piaxtla; otros optaron por regresar a casa esperando que la enfermedad no les llegue.
El municipio queda a la espera de que pronto lleguen más dosis para que puedan aplicarse al personal médico en primer lugar, quienes desde hace meses se exponen de manera directa a cualquier contagio y a toda la población en general que necesita de su aplicación para poder salir a trabajar sin el temor de contagiarse.
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