El Comité Estatal del Movimiento Antorchista en Guanajuato denunció que el pasado 12 de abril, los jóvenes líderes Conrado Hernández Domínguez y su esposa Mercedes Martínez, fueron asesinados a golpes, en el estado de Guerrero, mientras que su hijo de siete años, fue asfixiado en el mismo ataque, presuntamente por sicarios.
A nombre y representación de miles de guanajuatenses, afiliados al antorchismo, los integrantes del comité exigieron cárcel para los asesinos de sus compañeros y anunciaron movilizaciones en Guerrero y en todo el territorio nacional si no hay resultados, en un corto plazo, para hacer justicia y encarcelar a los responsables de este brutal crimen.
Marcos Pérez García, dirigente estatal del Movimiento Antorchista, expuso que en todas las capitales y en la Cámara de Diputados realizaron conferencias de prensa para denunciar el multihomicidio.
"La conclusión de la autopsia realizada por un perito del Semefo de Guerrero señala que nuestros compañeros fueron asesinados a golpes, mientras que su pequeño hijo fue asfixiado y que sus cuerpos fueron encontrados en su carro en una barranca de la carretera México-Acapulco, cerca de Chilpancingo", dijo en conferencia de prensa.
"Nos sumamos a la exigencia para que los encargados de impartir justicia en Guerrero abran una investigación seria y apegada a los hechos para encontrar a los autores intelectuales y materiales del triple asesinato y se les encarcele. Solicitamos que la gobernadora use toda su estructura para garantizar que se haga justicia y se castigue a los responsables de estos crímenes atroces", agregó.
Remarcó que todos los antorchistas del país estarán al pendiente del avance de las investigaciones y, si en un corto plazo no hay resultados, van a realizar en Chilpancingo una marcha con miles de guerrerenses y de ser necesario, harán una serie de movilizaciones regionales o nacionales en Guerrero y en cada entidad federativa.
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