Hermosillo, Son. Por duro que se escuche, un pronóstico de muerte inminente espera a mucha gente que de hecho desfallece de hambre en Sonora; no es bueno exagerar, ni es nuestra intención alarmar, pero tampoco se debe ocultar la verdad de que en muchas colonias humildes de Hermosillo hay hambre y que no se está haciendo nada serio, ninguna medida estructurada por el poder público para evitarlo, dijo Carlos Coronado Estrada, responsable de la preparatoria Nueva Creación, en la colonia Café Combate, de esta ciudad.
El hambre y la falta de empleo en esas colonias en poco tiempo generará situaciones drásticas que no podrán resolver ni la caridad ni la fuerza pública: se requieren acciones urgentes en forma de programas sociales gubernamentales que vayan más allá de las meras declaraciones simulatorias, agregó, "y eso es lo que Antorcha ha estado exigiendo por todos los medios a su alcance sin que hasta el momento haya autoridad que responda".
Comentó que ese ambiente es perceptible en lugares como las colonias La Antorcha, Humberto Gutiérrez, Manuel Serrano, la Cajeme, la Plutarco Elías Calles, Solidaridad, El Chaparral, Gómez Morín, Ladrilleras, Laura Alicia y el Guayacán.En el Oriente de Hermosillo en La Café Combate, San Luis, Amapolas, Metalera, Rinconada de la Cruz, El Ranchito, Bella Vista, El Coloso Alto, El Coloso Bajo, El Mariachi, Cinco de Mayo, Cañada de los Negros, Matanza, Las Pilas y La Hacienda de la Flor.Al Sur de la ciudad destacan por su pobreza Piedra Bola, Akiwiki, Emiliano Zapata, Palo Verde, Minitas, Los Olivos, El Apache, La Y Griega, Altares, Arcoíris, Las Tres Reinas y La Nueva Esperanza.
En todos estos lugares se está generando un descontento social extremo y desesperado que podría hacer explosión y que de por sí ya se está manifestando en el incremento alarmante de robos y asaltos ante los que las autoridades manifiestan un comportamiento errático y torpe, así como una incapacidad lamentable.Y lo mismo sucede en todas las ciudades principales de nuestra entidad, advirtió.
Recordó que ya antes de la pandemia el Coneval había indicado que en 2018 uno de cada sonorenses no ganaba lo suficiente para irse a la cama sin hambre.Ahora la situación es drásticamente más grave.
"Es decir, entramos a la pandemia con un cuarto de nuestra población ya de por sí malalimentada, y ahora son decenas de miles de familias las que se suman a esta condición: temo que el virus hará estragos, sobre todo con los más débiles entre los débiles".
"Y en Antorcha estamos en contra de el pensamiento criminal que dice que se mueran los que se tengan que morir: eso nunca lo aceptaremos los antorchistas y lucharemos hasta el fin por qué vivan nuestros débiles, porque gracias a su trabajo cuando eran fuertes o a su amor hoy somos lo que somos y no es humano abandonarlos.Seguiremos luchando por un programa nacional de distribución de alimentos a todo el que lo necesite y por trabajo".
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