MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Un cambio para seguir igual, vieja práctica del neoliberalismo

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En un trabajo similar y anterior a este, motivado por la abundante y machacona propaganda electoral que ya sufrimos hoy, misma que se está ya derramando por casi todos lados, sostuve que a mí me parecía algo así como una farsa, el hecho de que los partidos políticos tradicionales, que se dicen contrarios a los gobiernos de la 4T, sostuvieran que buscan en su próxima batalla electoral un cambio social para el país y sus Estados, por un lado, pero que por el otro, no estuvieran, para esto, tomando en cuenta a la opinión y participación activa y efectiva de los verdaderos representantes del pueblo trabajador. Lo dije así porque, luego de conocer, cuando menos en el caso de Colima, los prospectos de casi todos los partidos políticos a candidatos a la gubernatura, a las diputaciones federales y locales, así como a las presidencias municipales y sus respectivos ayuntamientos, no distinguía yo, con honrosas excepciones, en casi ninguno a los verdaderos representantes populares; es decir, a los voceros directos de las necesidades del pueblo trabajador.

Ahora, agrego que, seguramente por estrategia electoral, esto es así dada la necesidad que se tiene, de las componendas obligadas ante las modernas alianzas partidistas. Pero, entonces, con esto quedaría también una vez más demostrado, que las modernas alianzas de los partidos no van encaminadas pensando, precisamente, en las deplorables condiciones de vida en que viven ya casi todos los mexicanos con este gobierno. Si esto que yo denuncio ahora, se consumara tal como se viene dando, no cabe ya la duda de que, en las próximas elecciones, como siempre, el pueblo será relegado del reparto del poder y estaremos nuevamente solos.

Es por esto que ahora opino, que, de no corregirse el rumbo de los acontecimientos promovidos ahora por todos los partidos, gane quien gane y pierda quien pierda en el próximo 6 de junio, está claro que habremos promovido una vez más un cambio con nuestro voto, pero para seguir igual o peor que como estamos.

Pero entonces, aquí son necesarias algunas preguntas: ¿por qué, los partidos políticos tradicionales que se dicen contrarios a la 4T, que perdieron el poder en la elección del 2018, no aprenden la lección de su derrota? Es muy evidente que la mayoría del pueblo les negó el apoyo y les dio la espalda en la elección pasada, porque se sintieron defraudados y maltratados por ellos. Se sabe que fueron millones los mexicanos que dieron su voto a Morena, tan sólo para no dárselo a los políticos arribistas de siempre. ¿Por qué entonces se empecinan nuevamente éstos, en desdeñar, ignorar y relegar al pueblo, del cambio social que dicen buscar para el pueblo mismo? Aquí sólo se antoja pensar en una respuesta para ambas preguntas: que los promotores del moderno cambio, y los de la continuidad de la 4T, en el fondo son los mismos y persiguen entonces los mismos intereses.

Yo digo esto porque, pareciera que, en casi todo el país, por lo que ya estamos mirando, los mismos grupos de poder político y económico de siempre, son -solo que con diferentes colores-, los mismos que ahora están detrás de la tendencia de la continuidad y el cambio. ¿Que esto no es posible, acaso dirá usted, amigo lector? Pues yo le digo que, para el moderno modelo de producción neoliberalista, en su intención por manipular el poder político, todo esto y más le es posible, mientras no se le oponga en frente y de manera organizada el proletariado, es decir, el trabajador, que es el verdadero productor de toda la riqueza social, misma de la que se apropian unos cuantos potentados, para hacer con el poder lo que les viene en gana. Es aquí, precisamente, donde se explicaría, que se busque relegar nuevamente al pueblo trabajador de las grandes decisiones de los gobiernos.  

Entonces, sostengo que, de consumarse este nuevo engaño del cambio contra todos los mexicanos, lo que realmente veremos en acción en este próximo 6 de junio, será algo así como la mitológica Hidra de Lerma en batalla consigo misma; aquel antiguo monstruo marino que mató Hércules en el segundo de sus doce trabajos, que tenía por forma la de una serpiente policéfala, es decir, con muchas y feroces cabezas. Sólo que para vencer a este moderno policéfolo llamado neoliberalismo, hará falta mucho más que sólo un Hércules mitológico.

Pero, por fortuna para la humanidad, no hay exceso que no cobre al fin sus propias y fatales consecuencias. Cito a continuación en abono a lo que digo, un importante documento que no hace mucho tuve la oportunidad de leer; me refiero a la tercera encíclica llamada Fratelli tuti (Hermanos todos), que el Papa Francisco dirigió a todos los fieles católicos, en octubre del año pasado, en la víspera de la memoria de San Francisco de Asís, en la ciudad de Asís, Italia. De este importante trabajo de humanismo del Santo Papa, rescato yo un pasaje que bien pudiera servirnos para ilustrar el tema que ahora expongo. Veamos.

Se lee esto en el documento referido: "el mercado solo no resuelve todo, aunque otra vez nos quieran hacer creer este dogma de fe neoliberal. Se trata de un pensamiento pobre, repetitivo, que propone siempre las mismas recetas frente a cualquier desafío que se presente. El neoliberalismo se reproduce a sí mismo sin más, acudiendo al mágico "derrame” o "goteo” -sin nombrarlo- como único camino para resolver los problemas sociales” (Ft. 168). Y ya vimos cómo (esto ya lo digo yo), es que la realidad vino a demostrar, sobre todo durante lo que va de la pandemia, que lo escrito por el Papa se confirma en la realidad que hoy vivimos: pobreza, miseria, muerte, enfermedades, desempleo y muchas otras lacras sociales más para los pobres del mundo, es lo que ha significado hasta ahora, el mágico "derrame” o "goteo” que, según el Santo Papa, representa para la humanidad el sistema neoliberalista de producción.

Pero, también se dice en la encíclica que, "el neoliberalismo se reproduce a sí mismo sin más […]” Y así lo creo yo también. Por eso es que sostengo que, para su reproducción, le es menester promover en el poder cambios, en los gobiernos, pero para que los pobres sigamos siempre igual. ¿Es este tipo de cambio el que buscan ahora los partidos contrarios a la 4T? Dejemos pues que el tiempo, que todo lo descubre, nos lo diga en el momento adecuado. Estaremos atentos. (Para más opiniones sigue mi cuenta @LuisEnColima, estoy a la orden).

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