Los comicios del próximo cinco de junio no solo definirán nuevas gubernaturas en Aguascalientes, Quintana Roo, Oaxaca, Tamaulipas, Durango e Hidalgo, sino que, con los efectos políticos, la actual crisis económico-sanitaria influirá en la configuración de los competidores de la elección presidencial de 2024.
De acuerdo con los analistas, también harán aportaciones fundamentales, aunque en menor proporción, los remanentes políticos de las elecciones del seis de junio de 2021; y los resultados de las elecciones en 2023 para gobernador en Coahuila y el Estado de México (Edomex), entidad con el mayor número de votantes en el país (11.6 millones).
Al cierre de esta edición, en medio de disputas internas, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) ya había nominado a sus seis candidatos mediante encuestas de popularidad; en tanto que el bloque opositor, conformado por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), solo había definido postulantes únicos en cuatro estados: Aguascalientes, Durango, Tamaulipas e Hidalgo.
Los dirigentes de la oposición aún mantenían conversaciones para la designación de aspirantes comunes en Quintana Roo y Oaxaca, donde cada partido tiene aspirantes propios a quienes considera con posibilidades de encabezar las fórmulas únicas en ambas entidades.
El 14 de diciembre del año pasado, el dirigente del PAN, Marko Cortés, declaró que la nominación de candidatos apoyados por los tres partidos tiene el objetivo de evitar que los gobiernos sigan destruyendo entidades.
Por su parte, el priista Alejandro Moreno comentó que la alianza opositora permite a los partidos “una mayor capacidad de competitividad. También estamos fortaleciendo el trabajo de la coalición legislativa en el Congreso de la Unión”.
El líder nacional del PRI aseguró que la alianza busca que los ciudadanos de las entidades donde habrá comicios para elegir gobernador “contrasten y vean que Morena es una tragedia, es una desgracia para este país, que no hay resultados y que la coalición Va por México es una coalición potente, que puede tener propuesta, solución y resultados a favor de los ciudadanos”.
Moreno negó además que el partido Movimiento Ciudadano (MC) vaya a sumarse al bloque de oposición, porque sus líderes no han mostrado interés en hacerlo y que, por el contrario, se ocuparán de dividir el voto opositor en beneficio de Morena.
Las elecciones locales de 2022 se realizarán un año después de las elecciones del seis de junio de 2021, cuando se renovaron 15 gubernaturas y las 500 curules de la Cámara de Diputados, en cuyo proceso comicial, la alianza PRI-PAN-PRD logró reducir la aplastante mayoría que Morena había obtenido en 2018.
Con este acotamiento, Morena perdió la posibilidad de aprobar más reformas constitucionales junto con sus aliados parlamentarios de los partidos del Trabajo (PT) y Verde Ecologista de México (PVEM), con los que también formará bloque electoral este año.
En 2021, Morena obtuvo 11 de los 15 gobiernos en disputa; y gobierna actualmente en 18 de las 32 entidades del país. Ahora, con el respaldo de su propia alianza partidista en la mayoría de las entidades, buscará sumar seis más –todas bajo el mando del PAN y el PRI– para obtener 24.
Crisis en todos los partidos
El catedrático en derecho y analista político José Luis Espinosa Piña reveló que la situación de los partidos políticos se ve muy complicada ante los comicios del próximo cinco de junio. Destacó que Morena “trae sus guerras internas; éstas aparecen, un día sí y el otro también, en todos los estados”.
“Ante un escenario de revueltas al interior de los partidos, de debilitamiento de las instituciones, de indefinición de candidaturas, la moneda está por completo en el aire, porque todos los partidos experimentan la peor de sus crisis; y esto arroja solo un resultado definitivo, una sentencia: el sistema de partidos políticos en México está agotado; se acabó, no da para más. La prueba es lo que estamos viendo”, aclaró Espinosa a buzos.
Aseveró también que, en este marco de crisis, están aflorando los mismos vicios del viejo PRI que han criticado los demás partidos, entre ellos Morena. Puso como ejemplo el uso del “dedazo” para designar candidatos. “Resulta que esa práctica es la que se ha impuesto en esta época, y eso es un signo de deterioro”.
Espinosa Piña afirmó que la priización es nacional, pero que “la peor versión de ese PRI hoy se llama Morena, porque Morena fue un paso más allá del viejo PRI. No solo trata de rescatar al más rancio y anacrónico de los priismos, que es el priismo echeverrista, sino que trata de imponer una nueva dictadura de partido, que sería la cuarta transformación del PRI, que es un Morena omnipresente; algo así como lo que era el PRI en los años 70.
“Pero, como podemos ver, por lo menos en el PRI de los años 70 había gente que tenía oficio político, conocimiento técnico. Hoy ni siquiera eso vemos en el gobierno actual de Morena; pero sí vemos control corporativo, mecanismos piramidales, concentración del poder.
“Veíamos que podía estar el PRI en el gobierno concentrando todo; pero veíamos que había grandes técnicos en el gobierno que podían equilibrar las cosas. Eso obedece a criterios de conocimiento y de calificación y hoy es compadrazgo, amiguismo, pertenencia a Morena y padrinazgos”, agregó el experto.
Además, recordó con insistencia que Morena es “un engendro mal concebido” del viejo sistema priista, lo cual “se confirma al ver que sus principales figuras surgieron en el PRI, empezando por el Presidente”.
Candidaturas aliancistas sin definir
Al margen de que, el seis de enero de 2022, la alianza opositora anunció que había acordado que el PAN designara a los candidatos a gobernadores en tres de las cuatro entidades donde van en coalición, poco antes del cierre de esta edición, el gobernador priista de Hidalgo, Omar Fayad, se confrontó con el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, declarándose inconforme de que el PAN fuera el encargado de elegir al candidato al gobierno de su entidad.
La expresión de inconformidad de Fayad se produjo pese a que la candidata de Va Por México es la diputada federal priista Carolina Viggiano, esposa del exgobernador de Coahuila, Rubén Moreira Valdez, quien es hoy coordinador de la diputación federal del PRI.
La decisión del PAN de nombrar a una priista en Hidalgo se debe a que esta entidad es considerada aún un bastión priista, a diferencia de lo que ocurrió en Tamaulipas y Aguascalientes, donde los aspirantes de la alianza son panistas, pues ambas entidades son gobernadas por el partido blanquiazul.
En el caso de Quintana Roo, el PRD intentó designar como candidato aliancista al actor Roberto Palazuelos, pero la dirigencia nacional y estatal del PRI bloqueó la propuesta. Sin embargo, y pese a que el PRI ha anunciado que postularía aspirante propio, se mantenían las pláticas hasta el fin de la semana anterior.
Con la perspectiva de un acuerdo con sus otros aliados, el PRD hizo dos propuestas: la senadora del PAN, Mayuli Martínez y la diputada del PVEM, Laura Fernández, quien incluso renunció a este partido para unirse al PRD. Hasta ahora está pendiente la candidatura aliancista de esa entidad.
En Aguascalientes, el dirigente del PAN, Javier Luévano, registró la candidatura común de la alianza opositora el 30 de diciembre de 2021 ante el Instituto Estatal Electoral (IEE), la cual tendrá el objetivo de instalar un gobierno de coalición regido por los principios de paz social, igualdad y desarrollo.
En Durango, el dos de enero se formalizó la alianza oficialista conformada por Morena, PT, PVEM y Redes Sociales Progresistas; en tanto que el PAN registró al panista Héctor Flores como precandidato al gobierno de la entidad; a su vez, el PRI lanzó ese mismo día su convocatoria para el registro de precandidatos a la gubernatura.
Según el acuerdo de los partidos opositores, cada uno de ellos efectuará su proceso interno de selección para aspirante al gobierno duranguense; y más adelante, ya con los tres aspirantes designados, se realizará otro proceso para definir quién será el candidato de la alianza, cuya postulación oficial se hará el próximo seis de febrero.
En Tamaulipas, entidad gobernada por el panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca, el PAN será el encargado de nominar al candidato de la alianza. El dirigente estatal de este partido, Luis René Cantú, anticipó que ya estaba lista la designación del aspirante aliancista; y que se emitiría oficialmente antes del 15 de enero.
Ante la prensa, y en torno a los conflictos partidistas surgidos en la entidad, Cantú declaró que se conversaría con los inconformes de los tres partidos para establecer acuerdos políticos que permitan la continuidad de la alianza opositora.
Los candidatos de Morena
Para la nominación de los seis candidatos a gobernador de Morena se integraron listas de aspirantes a participar en encuestas de popularidad, método que presuntamente evitaría rupturas internas; pero que, en la práctica, no hizo más que encender los ánimos de decenas de aspirantes desplazados.
Entre éstos, por cierto, destacaron los “superdelegados” del gobierno y numerosos exmilitantes del PRI, PAN y PRD que ahora militan en las filas de Morena y que cambiaron de “chaqueta” precisamente para postularse como candidatos a las gubernaturas.
En Aguascalientes, estado administrado por el panista Martín Orozco, Morena postuló a Nora Ruvalcaba Gámez, profesora normalista, exdirigente perredista estatal, convertida luego en morenista y “superdelegada” del Gobierno Federal en 2021 quien, en 2010, fue candidata del PRD a la gubernatura estatal y en 2016 volvió con el respaldo de Morena.
En Durango, gobernado por el panista José Rosas Aispuro Torres, la nominada por Morena es Alma Marina Vitela Rodríguez, expresidenta municipal de Gómez Palacio, enfermera de profesión, quien se formó políticamente en el PRI, donde fue consejera local y nacional, secretaria de la dirección estatal y titular del Organismo Nacional de Mujeres Priistas (ONMPRI). Fue también diputada local y federal del PRI y luego de Morena en 2018.
En Hidalgo, donde gobierna el priista, Omar Fayad Meneses, entidad en la que hasta ahora no ha gobernado ningún partido distinto al PRI, Morena postuló al senador Julio Menchaca Salazar, quien fue priista durante la mayor parte de su vida política y exmagistrado del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE).
En Oaxaca, cuyo mandatario actual es el priista Alejandro Murat, Morena postuló al senador Salomón Jara Cruz, exdirigente estatal del PRD quien busca, por segunda ocasión, la gubernatura oaxaqueña con Morena, luego de perder los pasados comicios ante el actual mandatario.
En Quintana Roo, Morena postuló a Mara Lezama Espinosa, quien fungía como presidenta municipal de Benito Juárez (Cancún); y en Tamaulipas al senador Américo Villareal Anaya, cuya carrera política se desarrolló principalmente en el PRI, partido al que renunció en 2016 para sumarse al ahora partido oficial.
Inconformidades morenistas
En el proceso de nominación de candidatos a gubernaturas por Morena surgieron conflictos internos generados por la inconformidad de aspirantes desplazados.
En Oaxaca, la cantante y ahora senadora de Morena, Susana Harp, buscó la nominación por Morena, quien el 30 de diciembre impugnó públicamente la designación como candidato del también senador Salomón Jara, con la posibilidad de hacerlo jurídicamente.
“Esta impugnación al proceso es específicamente hacia eso, hacia los criterios aplicados, no contra una persona, no estamos impugnando contra nadie, es contra los criterios, porque nos asiste la razón, la Constitución y la ley”, aseveró Harp.
En el caso de Durango, los inconformes son dos: uno el exalcalde de la capital, José Ramón Enríquez, actual senador de Morena (antes lo fue por el MC); y otra la diputada local morenista Maribel Aguilera Cháirez, exdelegada estatal del PRI.
El seis de enero, militantes morenistas de Durango iniciaron, en Aguascalientes, una serie de protestas en varios estados contra “una imposición del centro para favorecer a Marina Vitela”, ya que el senador José Ramón Enríquez fue declarado ganador en la encuesta de popularidad con el 48.6 por ciento de las preferencias.
En Hidalgo, el diputado local morenista Francisco Xavier Berganza, cantante, renunció a su cargo legislativo una vez desplazado de la lista de participantes para la nominación de candidato por Morena mediante encuestas; y solicitó su registro como candidato independiente al gobierno ante el órgano electoral del estado.
Si es registrado, Berganza estaría disputando por cuarta ocasión la gubernatura hidalguense, a la que aspiró antes como postulante del PAN, Nueva Alianza y el MC.
En Tamaulipas buscaron la nominación morenista a la gubernatura los ex “superdelegados” federales José Ramón Gómez Leal, cuñado del actual mandatario estatal; Rodolfo González Valderrama, exjefe delegacional de Cuauhtémoc, Ciudad de México y la expresidenta municipal de Reynosa, Maki Ortiz, quien se sumó a Morena tras ser expulsada del PAN por sus vinculaciones políticas con el ahora partido oficial.
El 29 de diciembre, Maki Ortiz denuncio, en redes sociales, que el nombre del ahora candidato de Morena, Américo Villarreal, apareció en una lista previa de registros de aspirantes morenistas “aprobados” para los comicios estatales de 2022.
En Quintana Roo fueron aspirantes morenistas los senadores fallidos Marybel Villegas Canché –expriista, experredista, expanista– y José Luis Pech, exfuncionario del gobierno el estado. El 24 de diciembre, Villegas denunció, en su cuenta Facebook, que la candidata de su partido María Elena Lezama fue una imposición.
En Aguascalientes, el ex “superdelegado” Aldo Emmanuel Ruiz Sánchez aparecía como el favorito en las encuestas de popularidad previas; finalmente los resultados oficiales de Morena no lo favorecieron.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario