Hace algunos años, desde 2015 aproximadamente, un grupo de habitantes de Bahía de Banderas, en Nayarit, se acercó al Movimiento Antorchista y solicitó su apoyo para luchar por la regularización de los predios que habitan desde hace más de una década; así comenzó la lucha de la mano de Antorcha.
Después de gestiones, mítines y marchas en la capital de Nayarit y en la Ciudad de México, el Gobierno federal, que en ese momento encabezaba el expresidente, Enrique Peña Nieto, compró el predio de 33.5 hectáreas.
Esto fue apenas un pequeño paso, que se logró con muchos sacrificios, pero no ha sido suficiente para que los vecinos tengan paz y tranquilidad en sus hogares, pues el proceso de regularización no ha sido culminado, por el contrario, el actual gobierno le da largas a este trámite de manera que los interesados han vivido desalojos, amenazas constantes contra ellos mismos y contra los integrantes del Movimiento Antorchista. Los autores de esas amenazas se pasean con una tranquilidad sorprendente, se dan a la tarea de visitar a las familias para mentirles e intentar convencerles de que no luchen más.
Pero la lucha del antorchismo es justa y consiste en buscar la regularización de los predios para que las familias tengan tranquilidad sobre sus seres queridos y su patrimonio.
En estos días en que los mexicanos celebramos la independencia de nuestro país, queda la pregunta ante las actuales circunstancias que vive el pueblo: no hay vivienda, no hay servicios de salud ni una buena educación. ¿Somos en verdad independientes cuando hay miles de familias -como ejemplos las de Villas Miramar en Bahía de Banderas- que viven con el peligro constante de ser violentados y desalojados?
A través de este espacio queremos alzar la voz para que el Gobierno estatal que encabeza Miguel Ángel Navarro Quintero, las autoridades correspondientes de INSUS y el Gobierno federal dirigido por el presidente Andrés Manuel López Obrador cumplan su palabra al pueblo de Nayarit – al que sabemos que quieren mucho- y que entreguen la escrituración a las familias de la colonia Villas Miramar.
Por nuestra parte, los antorchistas de Bahía de Banderas y de Nayarit seguiremos luchando, juntos, hasta ver resuelta nuestra justa demanda.
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