Debido a la ola de calor y sequia registrada en el estado de Chihuahua, los cultivos de maíz y frijol que sembraron familias de la zona serrana del estado no se lograron, dejando a los campesinos sin alimento para el resto del año.
Ante esta crisis, cientos de familias se han organizado para solicitar apoyo por parte de las autoridades estatales, en particular a la Secretaría de Pueblos y Comunidades Indígenas, donde autoridades ejidales han entregado un pliego de necesidades, resaltando el apoyo con maíz y frijol, ya que sus cosechas se perdieron y se han quedado sin alimento para el resto del año.
“Sembramos nuestras tierras, pero no se dio nada, todo está muy seco”, afirmó José Evaristo. La zona serrana está muy afectada ante la falta de lluvias, pues la zona de Carichi fue parte del programa de estimulación de lluvias, sin embargo, solo una pequeña área se benefició con mínimas precipitaciones.
“Queremos maíz y frijol, es lo único que comemos. Además, sembramos poco de calabaza y papas, pero no alcanza para todo el año”, añadió.
Ante este panorama, el dirigente de la zona serrana de Chihuahua, el antorchista Juan Santiago Tolentino manifestó su preocupación ante la sequía, la ola de calor y la perdida de cultivos. Señaló que se están haciendo las gestiones en las áreas correspondientes para conseguir todo el apoyo que sea posible.
Reconoció la buena voluntad de las autoridades para apoyar a los cientos de familias que se vieron afectadas por la intensa sequía, por lo que en próximos días se formaran los comités para integrar los expedientes y entregarlos a las autoridades para después recibir los apoyos que incluyen alimento tres veces al año, semilla para cosecha, huerto de traspatio y aves de corral donde se les dota de 15 gallinas y un gallo, así como material para construir el gallinero. Programa que fue diseñado por un indígena para la comunidad indígena.
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