El primer paso para resolver un problema es reconocerlo. México es un país muy grande y los problemas van en aumento. En Nuevo León, uno de los estados más poblados del país con más de 6 millones de habitantes, la mancha urbana se ha extendido, al grado que otros municipios que, en antaño estaban en la periferia, se han convertido en grandes ciudades: García y Juárez, por ejemplo.
Andando por las calles de Nuevo León y sus municipios conurbados se pueden apreciar muchos problemas, que al parecer el gobierno en turno ni le inmutan: las calles siguen llenas de aguas sucias, por los constantes derrames de drenaje; miles de familia no cuentan con agua en sus casas, porque el gobierno se las corta sin previo aviso.
El transporte público es un dolor de cabeza para todos los trabajadores que lo usan diariamente; el nuevo transporte prometido por el gobierno es muy caro y no acepta pagos en efectivo y no se hacen descuento a los estudiantes; el Metro ya tiene un costo de 7 pesos y en muchos lugares los boletos son depositados en una caja. Llegará a nueve pesos en menos de un año y la línea 2 no se ve para cuando se vaya a reabrir.
En muchos lugares el tráfico es un infierno: Gonzalitos, Miguel Alemán, Barragán, Universidad, Morones, Constitución, son algunas de las avenidas saturadas en la mañana y en la tarde. Horas perdidas por una mala planeación de la vialidad. No se ve alguna idea realmente seria a que venga a resolver el problema de movilidad. Y eso que tenemos la gasolina más cara de México. Si a esto le sumamos los baches y los semáforos descompuestos (tardan una eternidad en resolver) y el calorcito que se ha dejado sentir, vivimos en un infierno de cemento.
Un día sí y otro no, aparecen los semáforos en amarillo y en rojo por la contaminación. De enero a mayo de 2023 se vivieron 107 días con mala calidad del aire. Lo que representa 70.8 por ciento de los días. La mala calidad del aire provoca problemas respiratorios, de la piel, etcétera.
En seguridad, nos conmocionó el asesinato de Monserrat a plena luz del día en León, Guanajuato. Nuevo León, no está muy lejos de esa realidad; ayer en la noche, a las 8:00 horas aproximadamente, sonaron balazos; no se supo quién perdió la vida o quedó herido. La semana pasada hubo 16 homicidios.
Vivir en la ciudad es un gran reto para todos los que estamos aquí. El gobierno actual no ha hecho nada importante para resolver estos problemas que así se plantean. Y si vemos que al gobierno le gusta maquillar cifras.
Así se vive diariamente en muchos lugares de nuestro estado. Se supo en los medios que el asesor jurídico del Congreso del estado fue asesinado en un campo de futbol. El gobernador ha anunciado la compra de un halcón negro para combatir la inseguridad, como si esa fuera la solución de fondo.
Los precios de la canasta básica se siguen resistiendo a bajar. De por sí, Nuevo León se ha considerado una de las ciudades más caras de México, en líneas anteriores hablé de la gasolina, pero para los trabajadores, el huevo, la tortilla, el pan, la leche, la carne, siguen siendo un lujo que muy pocos se pueden permitir.
En mayo, la inflación rondaba el 6 %. Y este indicador, tiene sus peros, ya que mucha gente no tiene tiempo para acudir al supermercado o simplemente estar buscando los mejores precios.
Los problemas que están a ras de suelo, los políticos no lo ven. El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) anunció por un lado que se había reducido la pobreza, en 7.6 por ciento al pasar de 43.9 por ciento a 36.3 por ciento, que equivale a 45 millones 738 mil pobres; y agrega la Coneval que, el número de personas que no tienen acceso a salud representó 39.1 por ciento, que equivale a más de 50 millones de mexicanos. Asimismo, aclara que el principal motivo por el cual la pobreza decreció es porque reviven dinero del gobierno o reciben remesas del extranjero. ¿Es suficiente para alegrarnos o hacer un carnaval? Por supuesto que no. Todo ello es efímero.
Vivir en la ciudad es un gran reto para todos los que estamos aquí. El gobierno actual no ha hecho nada importante para resolver estos problemas que así se plantean. Y si vemos que al gobierno le gusta maquillar cifras. Es absolutamente necesario que la gente adquiera conciencia de su realidad y que entienda que solamente involucrándose resueltamente en la solución de sus problemas estos tendrán respuesta.
Sí, la política es un asco, se ha convertido en muladar, por eso mucha gente rehúye, escapa de aquel que venga a invitarlo a participar en política, pero si no lo hace, los problemas seguirán en aumento y seguiremos sintiéndonos impotentes como cuando una hormiga le cae agua caliente.
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