Han transcurrido más de 40 días desde el terrible asesinato de Conrado N., Mercedes N., y su pequeño hijo en la capital de Guerrero y aún no hemos visto justicia. Es inaceptable que la fiscalía del estado y el Gobierno estatal no hayan logrado detener a los responsables de tan horrendo crimen. No podemos permanecer en silencio ante tanta impunidad y falta de acción por parte de las autoridades.
Millones de mexicanos están indignados por la falta de avances en esta investigación. Me solidarizo con aquellos que han perdido a sus seres queridos a manos de la violencia desatada en nuestro país.
Conrado, Mercedes y su hijo no eran simples estadísticas, eran personas reales con sueños, esperanzas y una vida por delante. Fueron arrebatados de manera cruel y despiadada, y sus familias merecen respuestas y que los responsables sean llevados ante la ley.
No podemos permitir que la memoria de estos inocentes sea olvidada. Por eso, anuncio, con determinación y valentía, que miles de antorchistas marcharemos en la capital de Guerrero el próximo 6 de junio. Nuestra presencia en las calles será un grito de justicia, un llamado urgente para que las autoridades actúen y se haga justicia.
No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras los asesinos continúan impunes, amparados por la oscuridad de la impunidad. Es hora de alzar la voz y exigir un cambio real en nuestra sociedad. La violencia no puede ser la respuesta a los problemas que enfrentamos como país.
Las autoridades deben hacer su trabajo, investigar a fondo este crimen y llevar a los responsables ante la justicia. No queremos más promesas vacías, queremos resultados tangibles y el castigo ejemplar para aquellos que han sembrado el terror y la injusticia.
A aquellos que han perdido la fe en nuestro sistema de justicia, quiero recordarles que no estamos solos. La solidaridad y la unión son nuestras armas más poderosas. Debemos seguir luchando, alzando nuestras voces y exigiendo que se haga justicia para Conrado, Mercedes y su hijo, de apenas seis años de edad, y por todas las víctimas inocentes que han sufrido en manos de la violencia desenfrenada.
El próximo 6 de junio marcharemos con determinación y esperanza en nuestras almas. Seremos una multitud de personas cansadas de la impunidad, decididas a luchar por un México mejor, más seguro y más justo. No descansaremos hasta que se haga justicia y hasta que los responsables de este crimen atroz sean llevados ante la ley.
No más silencio, no más impunidad. Ha llegado el momento de alzar la voz y exigir justicia para los inocentes. Unidos, como Antorchistas comprometidos con la justicia y el bienestar de nuestra nación, lograremos el cambio que tanto anhelamos.
¡No nos callarán, exigimos justicia ahora!
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