Últimamente los medios de comunicación han dado cuenta de la gran inconformidad que existe entre la población de las zonas urbanas y rurales del estado de Sinaloa, por las frecuentes fallas del servicio en sus hogares y negocios, y este pésimo servicio no es por minutos sino por horas y horas e incluso días, como sucede en los poblados rurales, y los daños a la salud y a los bienes son cuantiosos. En el primer caso, los más perjudicados es la población adulta mayor, los niños y bebés, que tienen que soportar altísimas temperaturas de más de 40 grados centígrados. En sus bienes porque lo poco que tienen de alimentos, y aparatos electrodomésticos, se les echan a perder, y nadie se hace responsable.
Ante esta generalizada inconformidad, el gobernador Rubén Rocha Moya, salió a dar la cara, haciéndose eco de la inconformidad ciudadana y exigiendo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) una mejora del servicio se reunió con el superintendente, y fue a la Ciudad de México para buscar una respuesta a este grave problema. Hasta aquí podemos decir que su actitud está bien. Sin embargo, nada sabemos en concreto de las soluciones, solo de que se mejorará el servicio, pero esto no basta, pues ni es nuevo el problema.
El problema de los apagones no es nuevo, se tiene décadas en esta situación, pero en los últimos años se ha vuelto más crítico. Las causas son múltiples, pero todo converge en la escasa, por no decir nula, inversión en mantenimiento de las redes y en la construcción de subestaciones eléctricas y obras de mayor magnitud, que garanticen suficiente abasto de energía para los hogares y negocios.
Este gobierno de la 4T, es el que menos ha destinado recursos para estos fines, ciertamente no recibió un sistema eléctrico de primera, pero lo cierto es que no ha hecho nada para corregir el problema, canceló varios proyectos de inversión en energías limpias, y hoy el país entero sufre las consecuencias de un gobierno caprichoso, falto de visión estratégica en este u otros rubros esenciales para la vida económica y social del país.
Derrochó los recursos públicos en sus proyectos faraónicos que a la fecha ni siquiera ha terminado al cien por ciento, el Tren Maya duplicó su gasto en comparación con lo presupuestado inicialmente, el AIFA, la refinería Dos Bocas, gastos que por todos lados supura corrupción.
El problema de los apagones no es nuevo, se tiene décadas en esta situación, pero en los últimos años se ha vuelto más crítico. Las causas son múltiples, pero todo converge en la escasa, por no decir nula, inversión en mantenimiento de las redes y en la construcción de subestaciones eléctricas y obras de mayor magnitud, que garanticen suficiente abasto de energía para los hogares y negocios.
Todo esto mientras la población sufre del mal servicio eléctrico (caro y malo), del pésimo servicio de salud, de la muy deficiente educación, de la falta de apoyo al campo, como lo vimos recientemente en Sinaloa, y todo el Noroeste del país.
¿Qué hacer ante esta situación? ¿Esperar que el gobierno federal por sí mismo corrija de inmediato este grave problema? ¿Confiar en que el gobernador Rocha Moya será escuchado por Manuel Barlett, jefe nacional de la CFE y dinosaurio priista hoy santificado por Morena y por el presidente López Obrador? A estas alturas del partido, cuando sólo faltan unos meses para que termine esta administración el presidente de la República sería como pedirle peras al olmo, y como ejemplo ahí están maiceros y trigueros, quienes, por confiar en terceros, al final fueron abandonados a su suerte, aunque lo nieguen una y otra vez los panegiristas del actual régimen.
Como siempre tratándose de graves problemas como éste, sólo la lucha del pueblo afectado podrá obligar a las autoridades respectivas a darle solución de inmediato y no para las calendas griegas.
Por lo pronto, los antorchistas no nos quedaremos con los brazos cruzados, nosotros somos de lucha y el próximo miércoles un importante contingente de afectados estaremos en las oficinas de la CFE, para exigir soluciones de corto y mediano plazo, por tanto, invitamos a toda la población y medios de comunicación a que nos acompañen en esta jornada de lucha que no cesará hasta lograr una mejoría sustancial del servicio.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario