El 5 de marzo, en el marco de las dos sesiones, el primer ministro del Consejo de Estado, Li Keqiang, rindió el “informe sobre la labor del gobierno” ante la I Sesión de la XIV Asamblea Popular Nacional. Se trata de un análisis sobre la actividad del gobierno chino, bajo la vigilancia del Partido Comunista de China, en el año que pasó, así como el trabajo de un lustro, pues se desarrolló el plan quinquenal acordado en el XIX Congreso del PCCh. Este informe es parte de las labores con las que culmina esta etapa gubernamental.
El informe incluye, además, en su periodo de análisis, las relevantes conclusiones que salieron del seno del XX Congreso del PCCh. (Todas las citas entre comillas se refieren al documento publicado en español sobre el “Informe sobre la labor del gobierno chino”).
El esfuerzo del Partido Comunista de China y de su gobierno, se ha concentrado en mejorar la calidad de vida de la población en China y ello es muy importante, pues normalmente el imperialismo norteamericano, con su guerra fría y sucia, ha procurado relacionar la palabra socialismo con pobreza; sin embargo, el ejemplo de China demuestra, justamente, todo lo contrario, pues en este informe sobre la labor del gobierno chino y en el XX Congreso del PCCh se informó que se había erradicado la pobreza absoluta y que se proponían construir un país moderno, desarrollado, armonioso con el medio ambiente y bello, y el objetivo de combatir la pobreza extrema ya se alcanzó, lo cual contrasta con los Estados Unidos donde “en una sola noche en 2022, aproximadamente 582,500 personas estaban sin hogar[1]” y, dice la BBC: “cerca de 40 millones de estadounidenses viven debajo de la línea oficial de pobreza[2]”.
De acuerdo con el informe, en materia de desarrollo social, han logrado elevar la escolaridad media de la mano de obra “de 13.5 a 14 años”, para una población de 1,400 millones de habitantes. También se han construido “42 millones de apartamentos”. El seguro de vejez básico “ha experimentado un aumento de 140 millones de tomadores, con cobertura para 1,050 millones de personas”. El alza de precios, a diferencia de México que está en un 8%, ronda en China el 2.1%, lo que refleja un control adecuado basado en la competencia y en un mercado que no se desborda ni se desequilibra, pues las medidas que se toman están basadas en la ciencia y no en el invento, la ocurrencia o la intuición como sucede con el gobierno morenista mexicano. También contrasta que en China no le den dinero en efectivo a la gente como lo hace el gobierno en México, pues, dicen, harían atenidos a los chinos, mejor les enseñan a trabajar o a producir para sacarlos de la pobreza.
En materia de ciencia, tecnología e innovación, debemos destacar del informe que han diversificado nacionalmente la ciencia y la tecnología, es decir, no la han concentrado en un solo punto y ello se muestra con “la construcción de laboratorios estatales y se han reorganizado los laboratorios nacionales prioritarios”. Pese a la intención de los Estados Unidos de frenar el desarrollo de China, negándole el acceso a los microchips, es relevante que la respuesta a este agravio sea el lanzarse hacia adelante, como lo demuestran “los avances en los vuelos espaciales tripulados, el de la exploración de la Luna y de Marte; así como la exploración de las profundidades marinas y terrestres”.
En ese mismo sentido, debemos considerar los importantes “avances en la supercomputación, la navegación satelital, la información cuántica, la tecnología neuroeléctrica, la fabricación de grandes aeronaves y la inteligencia artificial”. Relevantes son los datos que contrastan con la actitud de México ante la investigación y el desarrollo, ya que mientras nuestro país invierte menos de medio punto porcentual de su Producto Interno Bruto (PIB), en China se pasa de una inversión del 2.1% al 2.5%, pero con un PIB de 17.73 billones de dólares, mientras que el PIB de México alcanza apenas 1.273 billones, o sea, China invierte más en investigación y desarrollo que nosotros, pero con un PIB 14 veces superior al nuestro.
Asimismo, el informe destaca que “la tasa de contribución de los adelantos científicos y tecnológicos ha llegado a superar el 60%, todo lo cual ha permitido incrementar incesantemente la capacidad sustentadora del desarrollo propio de la innovación”.
Estos avances tecnológicos, puestos al servicio del esfuerzo por combatir la pobreza extrema, han llevado al país a sacar de la pobreza absoluta a 100 millones de habitantes, lo mismo que han logrado relocalizar a 9.6 millones de chinos a lugares más convenientes para la vida. Una mejora significativa del desarrollo productivo con un incremento del “10.6% en el valor agregado de la industria manufacturera de altas tecnologías”, lo mismo que un gran desarrollo de la infraestructura, pues se pasó de “25 mil a 42 mil kilómetros de vías férreas de alta velocidad”, casi al doble y de carreteras pasaron de “136 mil a 177 mil kilómetros” construidos, lo que representa un incremento del 30%. Todo ello en un mejoramiento significativo del entorno ecológico, pues “el consumo de energía por unidad del PIB y la emisión de dióxido de carbono (CO2) por unidad del PIB se han rebajado respectivamente un 8.1% y 14.1%.”
Grandes e importantes logros de China gracias a la dirección del Partido Comunista Chino bajo la guía de su gran dirigente, Xi Jinping, quienes no han abandonado los principios del marxismo como el hilo conductor de su proceso de desarrollo en el marco de la economía capitalista, pero bajo los principios socialistas.
Nubarrones de desestabilización se aprecian en el panorama con la intentona de Estados Unidos de impulsar la creación de una “OTAN” en la región Asia-Pacífico y con la estratagema norteamericana para hacer de Taiwán una Ucrania de la región. Es correcto que el gigante asiático insista reiteradamente en los permanentes llamados a la paz que ha hecho una y otra vez, pero que caen en oídos sordos, por ello, debe poner líneas rojas que, si el imperialismo norteamericano rebasa, deberá estar lista para defender con energía su soberanía y, con ella, la soberanía mundial como lo está haciendo el pueblo ruso. No dudo de que el pueblo chino y su gran Partido Comunista sabrán afrontar con sabiduría y energía los retos que le impone la realidad y que podrá abrirse paso en el mundo un modelo multipolar de cooperación y paz, como contraposición al modelo imperial guerrerista norteamericano, que prefiere donar a Ucrania millones de dólares que bien servirían para sacar de la pobreza a su pueblo.
China es un ejemplo para los pueblos del mundo y es necesario que los mexicanos aprendamos para que construyamos un socialismo con características mexicanas, así como en China se construye un socialismo con características chinas. Felicidades por el informe de desarrollo y progreso del gobierno chino, dirigido por el PCCh y su dirigente Xi Jinping.
[1] https://barriozona.com/mas-personas-sin-hogar-en-estados-unidos-revela-informe-del-gobierno/
[2] https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-53440439
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