El municipio de Tecomatlán se encuentra en el sur del estado de Puebla, en un clima muy difícil, agreste, un clima caluroso, casi semi desértico y en una zona montañosa con difíciles condiciones para sembrar. En 1974, llega el movimiento Antorchista e inicia una labor de cambio y renovación profunda de las condiciones sociales y políticas de este municipio de Tecomatlán.
Es entonces el municipio de Tecomatlán, la cuna del Movimiento Antorchista, que este año 2024 cumple 50 años de lucha y de trabajo. Y es Tecomatlán, nuestro bastión, nuestra cuna, el ejemplo en pequeño del esfuerzo que puede hacer el pueblo organizado para cambiar sus condiciones y hacer de un lugar desolado un oasis desde el punto de vista natural y desde el punto de vista social. Veamos por qué.
Tecomatlán, no tenía prácticamente nada. Con el trabajo y el esfuerzo tesonero del movimiento Antorchista, del pleno de Tecomatlán y de todo el Antorchismo Nacional, ha sido posible un cambio profundo. Desde el punto de vista educativo, Tecomatlán tiene todos los niveles: desde la ludoteca, donde los niños pueden ir a jugar, preescolar, primaria, secundaria técnica, centro de bachillerato tecnológico agropecuario, hasta el nivel licenciatura teniendo dos opciones: el Instituto Tecnológico de Tecomatlán "Aquiles Córdova Morán" y la Escuela Normal Superior "Mixteca Baja".
Pero no sólo eso ha logrado la lucha del Movimiento Antorchista, de la mano con los jóvenes fenerianos pudo lograrse también una villa estudiantil en donde pueden vivir cerca de mil estudiantes para continuar sus estudios.
El pueblo organizado de Tecomatlán inició una lucha en contra del cacicazgo local que tenía el control de la venta de productos y lo hizo mediante la formación de la Cooperativa Agropecuaria Antorcha Campesina y gracias a la organización de la gente en esta cooperativa, se pudo poner una serie de negocios que ofrecían los productos a un precio verdaderamente competitivo y no al precio del cacique, que siempre mantenía elevados precios y así tenía el control de muchas voluntades y sometía al pueblo.
El desarrollo económico de Tecomatlán es notable: primero, la cooperativa agropecuaria y comercial; después, tiendas de abarrotes, dos hoteles, una gasolinera, restaurantes Fonda Margarita que ofrecen comida tradicional poblana, un balneario de muy buena calidad también, donde pueden disfrutar las familias un fin de semana, entre muchos otros avances en materia económica.
En algún momento dado, el ingeniero Aquiles Córdova Morán señaló la necesidad de generar un microclima y hacer un poco más agradable el ambiente de Tecomatlán. El paisaje verde que hoy se disfruta, aún en tiempos de sequía, es un avance importante de esta comunidad ejemplar.
En Tecomatlán, desde hace ya muchos años, se instrumentaron dos eventos fundamentales para el Movimiento Antorchista Nacional: la Espartaqueada cultural y la Espartaqueada deportiva. En la Espartaqueada cultural los tecomatecos vieron la necesidad de tener un auditorio y Antorcha Campesina organizó a la comunidad y entre todos se logró en la Auditorio “Clara Córdova Morán”, que alberga a más o menos mil a mil 100 personas, y en este auditorio se han presentado muchísimos talentos a nivel nacional. Las Espartaqueadas, hoy, juntan a más de 10 mil jóvenes a lo largo y ancho del país, en donde se reúnen para participar en Tecomatlán y lo hacen justo en el auditorio. Debo mencionar que con el esfuerzo del pueblo se construye otro auditorio de primer nivel, con una capacidad de 2 mil personas, a la altura del desarrollo del pueblo organizado.
Pero también están las Espartaqueadas deportivas en donde se reúnen atletas de muy alto rendimiento y ahí en Tecomatlán están las condiciones para las justas deportivas, pues con mucho esfuerzo y con mucho trabajo del antorchismo tecomateco y del antorchismo nacional, se han podido construir instalaciones de primer nivel: cancha de futbol empastada con pasto sintético, pista de atletismo de tartán; campo de béisbol, canchas de voleibol y de basquetbol, y también se tiene una alberca olímpica. En fin, Tecomatlán recibe cada dos años a miles de jóvenes que participan en la Espartaqueada deportiva y hacen con ello un referente a nivel nacional.
Pero también los antorchistas de Tecomatlán reflexionaron sobre la necesidad de mostrar al mundo una cara distinta y lograron la construcción de un arco de entrada, una bellísima escultura donde se erige orgullosa a la altura: el logo de Antorcha en piedra. En su discurso de inauguración de esa magnífica obra, a un costado de las fuentes bailarinas del arco y del Museo de la Historia del Movimiento Antorcha y de Tecomatlán, el maestro Aquiles dijo que el arco de entrada tiene el propósito de decirle al pueblo, a todos los que visitan o pasan por Tecomatlán, que pasada esta puerta van a encontrar una sociedad modelo, una sociedad distinta, un modelo del México del futuro que los antorchistas quieren para toda la sociedad.
Esta sociedad modelo es la que quiere instrumentar el Movimiento Antorchista en todo el país. Precisamente quiero culminar informando a todos de uno de los encuentros sociales más importantes que se desarrollan en Tecomatlán: la Feria de Tecomatlán, la Feria de la unidad entre los pueblos, que tiene la característica de ser una feria gratuita.
Este evento demuestra cómo cuando el pueblo se organiza es capaz de entregarle a todos los miembros de la población, no sólo a los de Tecomatlán, sino a sus visitantes hermanos de Guerrero, de Oaxaca, de diferentes poblaciones de Puebla, de Morelos, del Estado de México, etc., un espacio para disfrutar de la cultura, del esparcimiento, de la alegría que trae a todos una feria tradicional mexicana.
La feria inició 11 de febrero con un desfile en el que participaron 5 mil jóvenes y adultos. Fue un gran desfile de carnaval, donde las comparsas que pasan por ahí reflejan las tradiciones de nuestra patria. El Estado de México participó con danzas aztecas, con comparsas tradicionales de Chimalhuacán, con la danza de los becerreros, con bailes de Guerrero, de Sinaloa y con la “marching band” de la secundaria técnica 112 de Nicolás Romero. Los compañeros de Puebla Centro hicieron un homenaje a la cultura China por el año nuevo del dragón y por ser china un faro de luz en la construcción de una sociedad más justa y mejor para todos.
La Feria de Tecomatlán concluyó ejemplarmente el 18 de febrero. Por ello, si los pueblos se unen y se organizan, son capaces de liberarse de todo yugo y de hacer grandes cosas. Invito a todo el pueblo de México a que conozca Tecomatlán y a mis compañeros antorchistas a que nos identifiquemos con Tecomatlán, a que lo defendamos enérgicamente, porque es nuestra cuna, porque es nuestra casa, porque es nuestra Antorcha. Apoyemos decididamente la Feria 2024 de Tecomatlán, la feria de la unidad entre los pueblos. Demos a conocer a todo el pueblo de México que existe en nuestro país un pequeño paraíso que sirve de modelo de lo que se puede hacer en México cuando el pueblo se une, se organiza y lucha. Viva la cuna del Movimiento Antorchista y viva la Feria de Tecomatlán 2024.
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