MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Felipe Carrillo Puerto, digno de imitar en su hacer político

image

Por sus acciones sociales para mejorar la vida de los mayas le llamaron, el "Apóstol del socialismo en Yucatán", "El Dragón Rojo de los ojos de jade", "Apóstol de la Raza de Bronce", todas evocadoras de su vida y de su muerte. Felipe Carrillo Puerto caló hondo en la mente y en el corazón del pueblo maya porque supo auscultar e impulsar sus más hondas aspiraciones, le habló a los suyos en su viejo idioma y los llevó a conquistar el poder político del estado, hecho que le permitió a este hombre extraordinario, realizar obras en beneficio de todo el pueblo yucateco, todas ellas justas, necesarias e impostergables. Vivió con sencillez y nunca tuvo inclinación por la suntuosidad, el poder personal o las prebendas; hombre de gran visión y avanzada para su tiempo que supo conjugar inteligencia, decisión inquebrantable, compromiso y un enorme amor por los indígenas mayas.

A 97 años del ominoso crimen cometido en contra de Felipe Carrillo Puerto y sus más cercanos colaboradores, yucatecos y mexicanos preocupados por los sombríos acontecimientos que ocurren en nuestro país, no deberíamos dejar pasar desapercibidas las lecciones que nos dejaron la corta pero fructífera vida del glorioso gobernador yucateco y líder del Partido Socialista del Sureste.

El pensamiento riguroso y la concepción de gobierno del prócer yucateco, debiera ser modelo a seguir por quienes hoy dirigen los destinos de este país. Felipe Carrillo Puerto identificó perfectamente los males que aquejaban a los menesterosos de su estado, avizoró la solución y llegó a la primera magistratura yucateca por la vía democrática con amplia ventaja en contra de su principal opositor, pero nunca perdió piso y mucho menos desconoció a quienes lo llevaron a ocupar cargo tan importante.

Los logros alcanzados en el gobierno de Felipe Carrillo Puerto fueron impulsados y sostenidos por la gran fuerza popular organizada –"ligas de resistencias”— que funcionaba en todo el estado. Entre sus acciones destacan: declarar de interés público la industria henequenera, el reparto de tierras, la construcción de caminos carreteros, vasta obra educativa y cultural, servicios médicos y jurídicos gratuitos, creación de cooperativas de producción y consumo; promulgación de leyes de previsión social y del trabajo, así como del divorcio, inquilinato, expropiación y revocación de mandato; incorporó a la mujer a los cargos de elección popular, etc. Sus acciones revolucionarias, son muestra palpable de lo que hace un gobierno popular, comprometido con los menos favorecidos; la congruencia entre el discurso y los hechos, es su sello distintivo; pero la congruencia, no es precisamente lo que distingue a nuestros gobernantes.

A pesar de que Andrés Manuel López Obrador llegó a la primera magistratura del país con un importante apoyo popular, motivado en buena parte por el hartazgo de la ciudadanía por las malas decisiones de gobiernos anteriores, y con la promesa de un gobierno preocupado por mejorar las condiciones de vida del pueblo pobre; la realidad demuestra lo contrario. Con el garlito de combatir la corrupción, lejos de ayudar a la población vulnerable le ha provocado daños mayores; la desaparición de guarderías infantiles, de comedores comunitarios, del programa prospera, del seguro popular, de fideicomisos como el Fondo de Atención de Emergencias, el impulso de reformas legales para tener leyes a modo, son tan sólo algunos ejemplos de ello. La corrupción está a flor de piel de la actual administración y es inevitable señalar el daño irreparable causado a la población al aplicar una austeridad irresponsable en el sector salud e implementar una política fallida contra la pandemia ocasionada por el covid-19, que ha provocado la muerte de 128 mil 822 mexicanos.

sa

Por otro lado, la economía sufre su crisis más severa en un siglo, con más de 10 millones de nuevos pobres y el cierre de al menos un millón de micro, pequeñas y medianas empresas según señaló el Fondo Monetario Internacional (FMI) el pasado 30 de diciembre, estimando también un decremento del 9 por ciento para este 2021; sin embargo, parece que todo esto a nuestros gobernantes les tiene sin cuidado.

Nuestra Patria se desmorona y nuestra democracia se debilita. Quienes conducen la política de este país están más preocupados por mantenerse en el poder que por el bienestar de los mexicanos. Urge que la masa popular se organice y tome en sus manos la responsabilidad de hacer un país más equitativo, pues solamente la acción decidida del pueblo organizado, dirigida por hombres honrados y visionarios, puede detener el tsunami que el Gobierno federal actual está provocando. El proceso electoral que se avecina es la mejor oportunidad para lograrlo. 

Los mexicanos organizados en el Movimiento Antorchista Nacional nos hemos dispuesto a aportar nuestro grano de arena en la construcción de un país más equitativo y justo para todos sus ciudadanos; llamamos a nuestros iguales a obrar en consecuencia. Acabar con los males que aquejan al pueblo humilde debe ser obra de él mismo. El movimiento liberador impulsado por Felipe Carrillo Puerto es una muestra de ello.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más