El XVII Encuentro Nacional de Teatro del Movimiento Antorchista en el Estado de San Luis Potosí, realizado del 21 al 23 de octubre, reunió a cerca de tres mil actores; más de 25 mil espectadores potosinos pudieron apreciar más de 40 puestas en escena. El Estado de México y Puebla resultaron triunfadores en las categorías amateur y semiprofesional. Apenas habían pasado 24 horas de clausurado este evento anual, cuando ya se había comenzado a planear y organizar otro de los eventos culturales antorchistas, el Quinto Concurso Nacional de Voces, que se llevará a cabo los días 26 y 27 de noviembre en el Auditorio "Gota de Plata" de Pachuca, Hidalgo.
Este concurso es de los más recientemente instituidos por el Movimiento Antorchista Nacional (MAN), pues es su quinta edición; pero ya se perfila en todo el país como uno de los eventos más relevantes por el número de artistas, más de 300, que participan y porque no depende del presupuesto oficial para reunir a los verdaderos amantes de la música en la temática de boleros y música ranchera. La actividad cultural es un trabajo arduo y titánico que durante todo el año está realizando la Comisión Nacional Cultural antorchista, que es la encargada de preparar y organizar alrededor de 20 eventos culturales y deportivos cada año.
El MAN es una organización social con impacto en al menos 15 millones de mexicanos; esto gracias al éxito de su gestoría social en obras, servicios y miles de apoyos, todo en beneficio de la gente marginada de la ciudad y del campo; la organización tiene presencia en los 32 estados y cuenta ya con un padrón de afiliados de cerca de dos millones de mexicanos.
Aunque su principal actividad es la gestión para demandar a los gobiernos, en sus tres niveles, atención y solución a demandas muy sentidas y elementales de la población; también, con un esquema de trabajo bien estructurado, utiliza la cultura y el arte como herramientas de educación y transformación del ser humano, con el claro objetivo de hacerlo más nobles y con la suficiente capacidad de razonar sobre la realidad objetiva de la sociedad, su entorno, la problemática política, social y económica por la que atraviesa, creando en él las capacidades que le permitan buscar y delinear una solución a cada problemática.
En su discurso de clausura de la reciente competencia teatral, el líder nacional del MAN, el ingeniero Aquiles Córdova Morán, hombre culto y seguramente uno de los hombres más estudiados y analíticos de México, fue enfático al señalar que esa educación y transformación se pretende lograr con el teatro y también con todas las otras artes.
"El teatro si se elige bien y se hace con interés, si quien lo hace, -grupo o individuo-, siente la responsabilidad y hace todo el esfuerzo por conectarse con el público, tiene que redundar en una mejor educación y en la elevación espiritual de la gente...Es una garantía que cuando la obra está bien seleccionada y se ejecuta con verdadero conocimiento, con maestría y con la intención de hacerse sentir, de hacerse entender y conectarse con el público, éste tiene que transformarse, debe ser diferente que como cuando llegó; así ganó algo, se ha transformado y le han surgido en la mente nuevas ideas, nuevos sentimientos en su corazón...Con un cerebro y un corazón activados, más listos, más despiertos y más dispuestos a funcionar mejor, a pensar y a sentir la vida de otro modo y a tratar de comunicar a los demás..."
Comunicar a los demás es, sin duda, contagiar a los demás de lo que el espectador vivió y sintió, el efecto multiplicador del arte y de todas las disciplinas artísticas dependerá, más que de los actores, de quienes pudieron apreciar la puesta en escena.
Con más de una década y media de promover el teatro, el antorchismo pregona y levanta la bandera de un teatro de calidad, que educa y transforma a la gente para que piense, razone y sienta más hondamente; esto se logra cuando se unen la calidad del dramaturgo con una excelente puesta en escena; por eso el MAN hace un teatro distinto. Interpretar a los grandes dramaturgos es difícil, pero en ello reside el gran valor educativo, el verdadero tesoro que hay que descubrir con trabajo y esfuerzo previos.
La actividad teatral y otras disciplinas como la danza, la pintura, la poesía y la música que promueve el MAN son ya una conquista y un medio de conocimiento, reflejan un lazo social y un enriquecimiento humano, un acto de conciencia, en un espejo social en el que la actuación se convierte en el vehículo de transmisión de conductas formativas para el espectador, quien después de apreciar una obra puede transmitir lo que sintió a otras personas. ése es el teatro de genios, ésa es la genialidad del teatro antorchista cuya bandera levantamos.
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