“Juro respetar la constitución y las leyes que de ella emanan, y si no lo hiciese, que el pueblo me lo demande”, declaran todos funcionarios al asumir el cargo que ejercerán por tres o seis años, trátese de un alcalde, gobernador, o del mismo presidente de la república. El ciudadano común, obrero, ama de casa, campesino, estudiante, comerciante, profesionista, etcétera, siempre espera que así se conduzcan y cumplan, cosa que nunca sucede.
Por el contrario, si un ciudadano comete una falta, le dejan caer, como acostumbran decir para hacerse respetar: “todo el peso de la ley” para enjuiciarlo y condenarlo a prisión, muchas veces sin que haya cometido delito o este sea menor.
Pero “Todo el peso de la ley” debería aplicarse a los funcionarios que, violando la Constitución, máxima ley de la república, se niegan a resolver las necesidades más importantes de los queretanos, como el agua potable en Maconí, Cadereyta, y a una gran parte del territorio estatal, mientras estos manipulan a los campesinos buenos e inocentes.
Desde sus ancestros, los campesinos han padecido la falta de este vital líquido y hace más de diecisiete años que el Gobierno de Querétaro y la Comisión Estatal de Aguas (CEA) acordaron por escrito llevarles agua de sus propios manantiales. ¿Por qué nunca se preocuparon por resolver el problema, y casualmente a escasos meses de la elección de alcaldes, diputados, senadores y presidente de la república, al gobierno panista y a los políticos de Morena, les nació el espíritu de servir a la gente y atender su necesidad?
La respuesta es obvia: a ninguno de los dos, igual de oportunistas y demagogos, les interesa resolver sus necesidades; les interesan los votos de los queretanos para seguir teniendo hueso y seguir viviendo del presupuesto.
Ni al gobierno panista de Querétaro ni a los políticos de Morena les interesan los verdaderos problemas y necesidades de la población queretana, sino sus votos y nada más.
Así lo evidencia el actuar de los funcionarios del gobierno estatal y algunos políticos de Morena. Los primeros, al declarar que ya está resuelto el problema de la falta de agua potable para Maconí y todo la zona alta de Cadereyta, y quienes para hacer creíble su anuncio, toman de escenografía un tanque de la CEA ubicado en las cercanías de Vizarrón, acompañado del presidente de Cadereyta, Miguel Martínez Peñaloza, y una decena del “pueblo”, utilizados como “enganchadores” para manipular a la gente.
Morena, por su parte, y con personas afines a su partido, acordó cerrar las instalaciones del Acueducto II para evitar el paso de agua a la capital del estado, como medida de presión hasta que no resolvieran el compromiso adquirido de dotar de agua a los pueblos, y el pago de 7 millones de pesos anuales por concepto de renta para la comunidad. ¿Desconocían los morenistas lo que iba a pasar?
La respuesta del estado no tardó en llegar: la Policía estatal, municipal y Guardia Nacional, dispersaron con golpes, patadas y culatazos a los campesinos, y apresaron a las autoridades delegacionales y comunales, liberados condicionalmente al tercer día. Necesitaban víctimas para su objetivo.
Lo que vino después han sido acciones de uno y otro lado: una campaña de medios desde el Senado de la república, ruedas de prensa, etcétera, y una marcha de Maconí al palacio de gobierno estatal para seguir exigiendo solución con personas solidarias, convocadas por los coordinadores de Becas para el Bienestar de los municipios de Landa de Matamoros, Tolimán, Peñamiller, y Arroyo Seco, para denunciar la agresión y exigir al gobernador una respuesta positiva. Para llamar la atención, también se convocó a compañeros de partido de Landa y Arroyo Seco a sumarse a la caminata con todos los gastos pagados.
Como dijo el clásico, no se hagan bolas. Que quede claro; ni al gobierno panista de Querétaro ni a los políticos de Morena les interesan los verdaderos problemas y necesidades de la población queretana, sino sus votos y nada más. Allá quienes se quieran dejar engañar y “chamaquear” por políticos tramposos, mercachifles y manipuladores, pues con esos nunca vamos a salir del atraso y de la miseria en que a ellos les conviene tenernos, para seguir siendo presa fácil de sus manipulaciones.
Mientras tanto, el antorchismo del estado seguirá exigiendo justicia con la ley en la mano a favor de los más de 100 mil queretanos sin agua.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario