A diez meses de los hechos ocurridos en el estadio Corregidora entre los pseudo aficionados del club gallos de Querétaro y los rojinegros del Atlas de Jalisco, poco se sabe de los responsables de los hechos y no sólo hablamos de los autores materiales de tales actos, sino también de los autores intelectuales sobre quienes debían recaer la culpa de lo que pasó ya que este episodio de violencia del 5 de marzo dejó 26 heridos, (dos de ellos graves de salud), decenas de escenas de brutalidad y más de 30 detenidos.
Y es que es extraño que en un partido de fútbol en donde el encuentro estaba 1-0 a favor del Atlas, campeón en eso entonces, cuando al minuto 62 iniciaron al menos dos riñas en diferentes zonas de las gradas del estadio Corregidora y tras percatarse de la magnitud de la riña, personal de seguridad del inmueble abrió las rampas de acceso de la tribuna hacia la cancha, para permitir que los aficionados descendieran y se alejaran de la violencia, sin embargo también se muestra imágenes en donde también permitieron el paso de agresores para enfrentarse entre las barras del otro equipo.
Ante tal trifulca, aficionados y sus familiares buscaron refugiarse en el centro de la cancha, sin embargo hasta ese punto llegaron los actos de violencia con sillas, barras metálicas y armas blancas, extendiéndose hasta los túneles, y aunque ese mismo día hubo pronunciamiento por parte del gobernador del Estado Mauricio Kuri se manifestaba en su perfil de Twitter, con el clásico mensaje que pronuncian los políticos: “La instrucción es clara: habrá castigo para los responsables de la violencia en el Estadio Corregidora” y que en primer término señalaba a la empresa propietaria del equipo Gallos; no hubo mayor castigo. Y es que aunque Guadalupe Murguía, titular de la Secretaría de Gobierno de Querétaro dijo que no hubo muertos, algunos espectadores señalan que al menos dos individuos habían perdido la vida.
Aunque en los medios de comunicación Mikel Arriola, presidente de la Liga MX aseguró que para abril todas las barras del futbol mexicano estarían credencializadas, esto no ha sucedido en su totalidad, hasta donde se sabe sólo algunos equipos lo han implementado, ahora la empresa Casino Caliente quien se ostenta como dueño y que existen rumores que los nuevos propietarios sería Grupo Lauman, propiedad del empresario mexicano Manuel Arroyo, empresa especializada en telecomunicaciones enfocada en la producción y transmisión de contenidos audiovisuales. Es el que provee de estudios, elementos de producción, instalaciones, entre otros a canales como el Canal del Congreso, Milenio Televisión, ESPN e incluso a Fox,; ninguno de ellos han señalado que mejoras de seguridad proponen para la utilización del Estadio Corregidora a puerta abierta ya que el próximo partido del domingo 22 de enero de 2023 y que aún es a puerta cerrada ya que el veto al estadio Corregidora y al estadio Olímpico Alameda, permanecerá hasta el 5 de marzo, cuando se cumpla un año de los trágicos hechos. Sólo se sabe que estará resguardado por elementos de seguridad.
El año 2022 cerró con un 55.7% de la población que se siente insegura en la ciudad de Querétaro, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Significa un incremento de 16 puntos en términos anualizados, con Querétaro como una de las 26 ciudades de un total de 91. (Portal: amquerétaro.com). Este dato inquieta a la población, entonces, qué se espera en eventos públicos; por tanto las autoridades deben tomar cartas en el asunto.
El fútbol es un deporte de entretenimiento pero es innegable que también es un negocio lucrativo, sin embargo es necesario que tanto la Federación, dueños y autoridades estatales cumplan con las medidas de seguridad y comodidad, que se investiguen la relación de los equipos con las llamadas barras, todo esto para dar tranquilidad a los verdaderos aficionados y evitar que sucedan actos como el ya mencionado arriba. Esto claro no es suficiente ya que donde queda el castigo a los autores ya sea intelectuales y materiales de tales hechos aberrantes, no es posible que a casi un año no se conozca que había detrás de los acontecimientos, ya que es absurdo pensar que sólo era amor y fidelidad por el equipo, porque cuando pasa algún acto delictivo a algún familiar de un funcionario, en cuestión de días se resuelve y esto ya lleva meses.
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