En Durango, el trabajo organizado ha permitido la creación de nueve colonias con un total de mil 600 terrenos para igual número de familias.
Fue a inicios del año 2005 cuando, gracias a la dirección de Pedro Martínez Coronilla, quien encabezaba a un grupo de solicitantes de terrenos, se logró establecer la colonia Luz Del Carmen Ocón, con alrededor de 370 terrenos.
Esta colonia costó una lucha de seis meses plantados frente al palacio de gobierno —hoy Museo Francisco Villa—. La lucha no fue fácil, hubo que superar la represión en contra de los que encabezaron la lucha, todos miembros del Movimiento Antorchista.
Con la apertura en 2015 de las colonias Miguel Cruz José, Clara Córdova, Unión, Fraternidad y Lucha y la Ampliación Unión, Fraternidad y Lucha completamos la nada despreciable cantidad de mil 600 familias beneficiadas con el trabajo antorchista.
Este primer logro fue sumamente importante, ya que abrió paso al reconocimiento de la organización en Durango. En esta colonia se lograron casi en tres años la introducción de servicios de: agua potable, luz eléctrica y drenaje, y hoy cuenta con áreas verdes y un centro de salud que atiende a una población de casi 5 mil personas.
Es importante destacar que casi todas las calles han sido pavimentadas sin costo para la gente. El costo de los terrenos fue semanalmente barato, con un promedio de 7 mil pesos.
A partir de este triunfo se organizaron más personas buscando la ayuda de nuestra organización. En 2007 se fundó la Ampliación Luz Del Carmen con 235 terrenos y en 2009 se fundó la colonia II Ampliación Luz Del Carmen con 80 terrenos, para inicios del 2010 se fundó la colonia Bicentenario con 160 terrenos y en 2011 logramos la colonia Humberto Gutiérrez con 240 terrenos.
Cabe destacar que empezó el equipamiento de suelo de servicios prioritarios sino también de escuelas y centros recreativos para las mismas.
Hoy, con la apertura en 2015 de las colonias Miguel Cruz José, Clara Córdova, Unión, Fraternidad y Lucha y la Ampliación Unión, Fraternidad y Lucha hemos completado la nada despreciable cantidad de mil 600 familias beneficiadas con el trabajo antorchista.
Sabemos hoy que todavía existen muchas familias sin acceso a un terreno, pero seguiremos trabajando para lograr de esta forma mejores condiciones de vida de muchas familias pobres.
Debemos crear un gran equipo, educarnos políticamente y formarnos en torno a las nuevas tareas de nuestra organización, con el objetivo de la toma del poder político, y con ello lograr un verdadero cambio para beneficio de las familias vulnerables de nuestro país.
La lucha una vez más demuestra que solo unidos y organizados podemos lograr nuestro objetivo. Sigamos adelante compañeros Antorchistas, el futuro es nuestro.
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